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Marta Díaz, 'influencer' y pareja de Reguilón, detalla cómo estuvo a punto de morir

La joven, con dos millones de seguidores en Instagram y cerca de la misma cantidad en YouTube, se sinceró sobre uno de los peores días de su vida.

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Marta Díaz, 'influencer' y pareja de Reguilón, detalla cómo estuvo a punto de morir

El pasado mes de mayo, Sergio Reguilón se presentaba en la Caja Mágica de Madrid para disfrutar del Mutua Madrid Open acompañado de una joven con la que semanas atrás había comenzado una relación. El jugador del Real Madrid, actualmente cedido en el Sevilla, descubrió su romance con Marta Díaz, aunque ella ya se había ganado su propia fama gracias a su trabajo como 'influencer' y 'youtuber', acercándose ya a los dos millones de seguidores tanto en Instagram como en YouTube.

Y precisamente ha sido esta última plataforma la que ha utilizado para repasar un episodio de su pasado que estuvo a punto de costarle la vida. "Vais a ver un vídeo muy distinto a lo que tengo acostumbrado", comenzó expresando la joven de 19 años antes de transportar su mente a su barrio, cuando tenía diez años y quedaba con sus amigos los fines de semana.

Para introducir la historia, aseguró que a esa edad solía salir con sus amistades en bicis, patines, skates, disfrutando además en compañía de su hermano AlphaSniper97, con más de 4 millones de seguidores y que el pasado mes de junio fue señalado como presunto culpable de viajar con su Lamborghini a 228 kilómetros por hora.

Los hermanos, para trasladarse desde su casa hasta las pistas de baloncesto y de fútbol, decidieron coger un quad: "Madre mía, la horita en la que cogimos el quad". Tras un encuentro con sus padres, reunidos con amigos, fue Marta la que quiso subir con el vehículo hasta su casa: "Se me metió en la cabeza, nada más salir del campo de fútbol, que yo subía el quad. Y cuando se me mete algo en la cabeza no paro hasta que lo consigo. Y cuando eres pequeña aún más".

Reguilón, junto a Marta Díaz y Odriozola.
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Reguilón, junto a Marta Díaz y Odriozola.

"Lo quería subir yo sola para que mis dijesen: 'Hala'. Lo típico de cuando eres pequeño...", explicó, pero su hermano se mostró más que reticente dada la corta edad de la niña. "Se van a ir sin verme coger el quad, y yo quiero cogerlo delante de ellos", continuó recordando. Y finalmente se salió con la suya y montó en el quad, a pesar de que no sabía cómo funcionaba.

Un accidente que casi acaba con su vida

"Empecé muy suave, controlando, muy bien, perfecto. Y no sé qué me paso, fue como que se cruzaron los cables y mi mano derecha le dio hasta abajo (en referencia a que aceleró a fondo) y os podéis imaginar cómo me puse con el quad, hasta el máximo que daba. Entré en pánico, en shock, que mi cabeza me decía: 'Ni se te ocurra quitar la mano del acelerador'. Me quedé petrificada", confesó. "No era capaz de frenar y empecé a dar vueltas. Una de esas el quad se me ladeó y fui directa contra la columna de hormigón de la puerta de mi casa. Me reventé. Reventé el quad, me reventé a mí, reventé todo", se lamentó.

"Caí redonda al suelo. Me di contra una columna cuadrada con la mala suerte de que justamente me di con todo el perfil de la columna en el ojo. Si no llega a ser por el casco, ahora mismo no estaría contando esta historia. Si no llega a ser porque mi padre me dijo 'ponte el caso', es que yo ahora mismo no estaría aquí. El casco me salvó la vida. Esa noche la vida me dio una segunda oportunidad. Recuerdo como que me fui. Me han contado que me vieron destrozada, con el cuerpo bastante fastidiado, me dolía al respirar", explicó. "Me parece una enseñanza y una moraleja importante y que todos deberíamos tener siempre en cuenta la protección, por muy profesional que seas".