EL HORMIGUERO

Mateu Lahoz se confiesa: "Si el VAR hubiese existido antes, yo aún tendría pelo"

El árbitro ha visitado 'El Hormiguero' y ha confesado qué le llevo a convertirse en árbitro y cómo ha ayudado el VAR a conseguir un fútbol más justo.

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Mateu Lahoz se confiesa: "Si el VAR hubiese existido antes, yo aún tendría pelo"

Antonio Mateu Lahoz (42) ha visitado este martes 'El Hormiguero' para disfrutar de un divertido rato junto a Pablo Motos y dar a conocer más detalles sobre el misterioso y enigmático mundo de los árbitros. De hecho, la primera pregunta ha sido acerca del motivo que le llevó a convertirse en uno de los nombres más destacados de la profesión, aunque la respuesta supuso el momento más emotivo del programa.

El primer árbitro profesional en ser invitado al espacio de las hormigas ha revelado que "desgraciadamente fue por el fallecimiento de mi padre. Somos seis hermanos y el mayor tuvo la lúcida idea de animarme a hacer algo que era chocante en ese momento. Era 1991, y eso marcó mi vida. La terapia de choque fue esa. Gracias al empujón de mi hermano y a esa mala experiencia que me tocó vivir", comentó.

Pero nada tiene que ver el arbitraje de sus primeros años con el que le toca vivir ahora gracias a la llegada del VAR. "Si el VAR hubiese existido antes yo aún tendría pelo. Ha dado un eco brutal a nuestra labor. Os agradezco a los medios cómo se lo habéis explicado a todos. Eso ha servido para valorar más nuestra labor, tanto la de asistentes como de principales, porque imagina que eres un árbitro de 14 años...". Y es que Mateu ha vivido situaciones más que complicadas durante su larga trayectoria en LaLiga: "Anda que no he comido yo pared por un error... Ahora con el VAR es distinto", confesó.

Dentro de esa dilatada y exitosa carrera ha tenido múltiples, que desgraciadamente son más recordados que los aciertos por su complicada profesión. Aún así, no ha querido confesar el más gordo que ha tenido porque "imagina lo que puede pasar mañana con la repercusión que tiene este programa". Tales errores le han llevado a ser insultado e increpado por miles y miles de aficionados, que en ocasiones la toman con el colegiado incluso antes de que haya empezado el partido. ¿El insulto más extraño que ha recibido? "Calientamuebles, en Segorbe", apuntó.

Quiere acercar el arbitraje a los más pequeños

Después de asegurar que su objetivo de joven era ser futbolista, quiso demostrar que la carrera de árbitro puede llegar a ser muy feliz y que es una profesión para inculcar a los más pequeños. Durante gran parte de la entrevista ha mostrado la devoción que siente por sus hijos y su pasión por el deporte rey, sea cual sea tu papel en él. "Quiero que los padres y las madres avancen en educar a los niños desde el 'por favor' y el 'gracias', y que si quieren dedicar dos o tres horas el fin de semana al arbitraje que lo hagan, que están practicando deporte", reivindicó.