ATLÉTICO DE MADRID

Filipe Luis resuelve el cubo de Rubik mientras le entrevistan

El lateral del Atlético acudió al programa de Andreu Buenafuente para hablar de su pasión por el cine y la ciencia.

Filipe Luis acude al programa de Andreu Buenafuente para resolver el cubo de Rubik y desmontar los mitos sobre el futbolista.
Filipe Luis acude al programa de Andreu Buenafuente para resolver el cubo de Rubik y desmontar los mitos sobre el futbolista.LATE MOTIV

Hay mitos que merecen la pena ser derribados. Uno de ellos es el que asocia a los futbolistas con personas sin ningún tipo de inquietud más allá de su propia profesión. Para demostrar que no es así, Filipe Luis acudió a Late Motiv, el programa de 0 que presenta Andreu Buenafuente.

El lateral del Atlético de Madrid acudió como invitado en la sección del colaborador Quique Peinado. "Es la persona que más sabe de cine que conozco y conozco mucho friki", aseguró el periodista al presentador antes de dar paso al futbolista brasileño.

Ya en la entrevista, Filipe aseguró poseer una colección de más de 2.000 películas de las que disfruta en un pequeño cine que tiene en su casa. "Hice alguna que otra locura para conseguir alguna de las películas", confesó el lateral rojiblanco.

Además de la pasión por el cine que derrocha Filipe, Quique Peinado desveló otra de sus grandes pasiones: la ciencia. "Un día se compró un cubo de Rubik y lo hace todo el rato, sin parar", aseguró el colaborador, que retó con uno al futbolista a hacerlo mientras concedía la entrevista. "Me gusta el cine pero también estudiar otro tipo de cosas. Tenemos mucho tiempo libre -los futbolistas- y no por eso soy más inteligente o menos que otros", explicó el futbolsita de 32 años, asegurando que tiene "muchísimas inquietudes" y se confesó como "una de las personas que más pregunta".

Para terminar la entrevista, el rojiblanco aseguró que hoy en día "los futbolistas se cuidan mucho más", asegurando que son más inteligentes y "no se gastan el primer dinero en comprar un coche", todo mientras resolvía el cubo de Rubik y el público lo celebraba como un gol.