Coric, finalista con ranking más bajo en la historia del torneo

Borna Coric ha demostrado a lo largo de esta semana que no ganó por casualidad a Rafa Nadal en la segunda ronda de Cincinnati, aunque es cierto que el balear llevaba más de un mes sin jugar. El croata, que había apeado antes a Musetti, se deshizo después de Roberto Bautista y de Auger-Aliassime, antes de dominar sin problemas (6-3 y 6-4 en 91 minutos) este sábado en las semifinales a Cameron Norrie, que había podido el día anterior con Carlos Alcaraz. Mucho nivel el de Coric, que es el tenista que alcanza la final del torneo con un puesto más bajo en la tabla de la ATP (152º, aunque juega con ranking protegido por las lesiones que le apartaron del circuito entre 2020 y 2021) desde que se instauró el sistema de clasificación en 1973; y el segundo peor en ese sentido que lo logra en cualquier Masters 1.000, después de Andrey Pavel, que era el 191º cuando llegó a la de París-Bercy. Su rival será de mucha categoría: Stefanos Tsitsipas, que pudo con el número del mundo, Daniil Medvedev.

Gracias a su fantástica semana, Coric ya está virtualmente en el top-100. Es el 48º y sería el 29 si levanta el trofeo. De momento, ha subido la friolera de 104 puestos. Es el único de los semifinalistas que aún no ha sido campeón de un evento de esta categoría, aunque tuvo su oportunidad en Shanghái 2018, pero lo frenó Djokovic. A sus 25 años, tiene una larga carrera por delante y parecer haber recuperado el tono que le puso al borde del top ten hace cuatro temporadas, cuando fue 12º.

Ya había ganado una vez a Norrie, en Roma 2019, curiosamente después de vencer a Auger-Aliassime, como ha ocurrido esta vez. El británico había hecho un gran esfuerzo físico para batir a Alcaraz y quizá lo pagó ante un Coric que no había sufrido tanto para avanzar y apenas sumó 15 errores no forzados. Poco le importó el cambio de hora y de pista provocado por una tarde lluvioso. El partido iba a disputarse sobre las 18:00 hora de Este en la Central y se jugó finalmente desde las 20:00 en la Grand Stand. Con tres quiebres despachó a Cameron, que buscaba su segunda final de Masters 1.000, tras ganar en 2021 la de Indian Wells. Las horas de rehabilitación, el trabajo y el esfuerzo de años, le han dado buenos frutos a Coric, como destaca la ATP. Por eso celebró este éxito con tanta rabia. Ahora, está a un paso de rematar una faena perfecta.

Tsitsipas alcanza su sexta final de Masters 1.00

Stefanos Tsitsipas tenía el cara a cara francamente en contra con Daniil Medvedev, un 7-2 que arrancó con cinco victorias consecutivas del ruso y que se ha ido nivelando ligeramente desde las ATP Finals de 2019, la primera ocasión en la que el griego se impuso. Este sábado lo hizo por tercera vez en Cincinnati, para entrar además en sus sexta final de Masters 1.000, en busca de un tercer título, primero en pista dura, después de los dos que ganó sobre la tierra de Montecarlo en 2021 y 2022. Tsitsipas se impuso por 7-6 (6), 3-6 y 6-3 en las 2h23 en un encuentro que debería haber empezado a los 15:00 hora local y arrancó sobre las 20:30 por culpa de la climatología.

Es la segunda vez que Stefanos gana a un número uno del mundo. Ya pudo con Djokovic cuando este era líder del ranking en Shanghái 2019. Jugaba por tercera vez consecutiva las semifinales del torneo y por fin las pudo superar. Y podría haberlo hecho con mayor comodidad si no se hubiera desconectado de mala manera en el segundo set, cuando encajó un 5-0. Medvedev se enredó después y demostró que no estaba tan bien como reflejaba ese marcador. El juego del heleno creció y el moscovita se descentró en un saque por culpa de unos fuegos artificiales que ya habían sufrido Norrie y Alcaraz en su duelo el día anterior. Lo perdió y con él, a la poste el partido. Al menos hizo el mejor punto del partido y sale de Cincinnati sin haber perdido ningún punto, porque defendía las semifinales de 2021.