Roberto Bautista demostró este jueves que las sensaciones tan buenas que evidenció en la ATP Cup hace unos pocos días se han mantenido en este Open de Australia. El castellonense pasó por sexta vez a la tercera ronda del torneo con uno de sus triunfos más aplastantes en Grand Slams. Perdió sólo cuatro juegos contra Philipp Kohlschreiber (6-1, 6-0 y 6-3 en 88 minutos), de modo que igualó su mayor paliza en la categoría, que había logrado en este mismo torneo, en la edición de 2014, contra el estadounidense Tim Smiczek (6-2, 6-1 y 6-1). El sábado se enfrentará a otro jugador norteamericano, Taylor Fritz, que se deshizo de su compatriota Frances Tiafoe (6-4, 6-3 y 7-6 (5)). El cara a cara lo tiene muy a su favor (5-1).

No lo tenía Roberto con el veterano Kohlschreiber, alemán de 38 años y actualmente el 134º del mundo, que le había ganado tres veces en cinco enfrentamientos, si bien es verdad que no coincidían desde 2018. Y el tiempo le ha tratado mejor al español, que hizo uno de esos partidos sólidos que le han convertido en un hueso muy duro de roer para sus rivales. Bautista apenas acumuló nueve errores no forzados, mientras que su oponente sumó 44, desesperado ante el muro que es el tenista de la Armada.

"Me siento muy bien, las condiciones hoy eran mejores que las del primer día, sobre todo para jugar contra alguien como Phillip. Le metí mucha presión al resto, con mucha intensidad, tirando mucho y defendiendo bien. He podido ganar em tres sets y acabando muy bien de energía", dijo Bautista, antes de valorar a su próximo rival, Frtiz, como un "un jugador con golpes muy duros y muy buen saque, muy complicado que viene ganando muchos partidos desde el final de la pasada temporada".

Cuadro masculino del Open de Australia.