El ATP 500 de Róterdam se quedó sin representación española en una jornada aciaga de octavos de final para Alejandro Davidovich. Pese a tener un estreno ilusionante en el torneo neerlandés, el malagueño cedió ante Marton Fucsovics, presa de su irregularidad y desesperación cuando la situación se puso complicada. El húngaro, sin hacer nada del otro mundo pero con un tenis correcto, selló su triunfo con claridad: 6-3 y 6-2 en una hora y 33 minutos de partido.

Alex empezó el choque como un auténtico misil. Como demostró ante Roberto Bautista, luce un estado físico envidiable, rapidísimo de piernas. Eso le permitió dominar desde el fondo de pista y mover de lado a lado al húngaro, que poco tenía que hacer en los intercambios largos. Si a eso le sumamos que Davidovich encadenó un winner detrás de otro y de todos los colores (derecha, revés, dejadas, remates, a contrapié...), la ventaja inicial con break a favor no era de extrañar. Pero en tenis, lo inesperado está a la vuelta de la esquina. Fucsovics mejoró el saque y su consistencia hasta darle la vuelta al marcador, incluyendo tres opciones de rotura salvadas en el quinto juego que hicieron mella en la cabeza del español. Ahí murió el set en favor del húngaro con un parcial a su favor de 6-1.

"¿Qué te pasa?", se decía a sí mismo Davidovich, con gritos de frustración que retumbaban en la vacía pista central del torneo. Lejos de que surtiese efecto para revertir la dinámica, Alex se hundió cada vez más en su propia negatividad mientras la figura de Fucsovics se agigantaba al otro lado de la red. Gracias a una mayor solvencia en el saque, con más del 70% de puntos ganados con primer servicio y seis breaks a favor, el húngaro cerró la victoria sin demasiados apuros para alcanzar los cuartos de final. Allí se verá las caras con Tommy Paul, verdugo de Bublik. Róterdam se queda sin españoles...

Tsitsipas avanza, Goffin cae

Los favoritos dejaron luces y sombras en el resto de la jornada. David Goffin, que llegó a Róterdam tras conquistar el título en Montpellier la pasada semana, quedó eliminado al caer contra todo pronóstico ante Jeremy Chardy (doble 7-6). Quien no falló fue Stefanos Tsitsipas, el mejor cabeza de serie en liza tras la eliminación de Daniil Medvedev, que selló su pase a cuartos de final a costa de Hurkacz (6-4, 4-6 y 7-5).

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