La tenista Rebeka Masarova, que en los últimos años ha competido con Suiza, lo hará de nuevo con España, como ya lo hizo en el pasado, en una decisión tomada "con el corazón". "Como deportista, uno es libre de elegir a qué país quiere representar. Para ello pueden haber diferentes motivos, en mi caso es una decisión que ha venido de corazón", escribió este lunes Masarova en su página de Facebook.

En el mismo texto, la tenista, número 451 en el ránking mundial, explica que su madre es española, su padre eslovaco, y ella nació en Suiza, por lo que tiene las tres nacionalidades. A los nueve años, la deportista se fue a Barcelona y compitió por España hasta que en 2014 decidió volver a Suiza y competir por la Confederación Helvética.  Según ella misma escribe, en las temporadas 2014, 2015, 2016 y 2017 "tuvo el honor" de competir con Suiza y cosechó los mejores éxitos de su carrera. Masarova no explica nada más sobre los motivos por los cuales decidió volver a mudarse de país y de bandera por la que compite.

Simplemente añade que está agradecida por el apoyo recibido y que tiene muchas ganas de volver a competir. La prensa suiza ha especulado con que las relaciones entre Masarova y la federación suiza de tenis no han sido óptimas en los últimos años. Con tan solo 18 años, Masarova ya ganó el torneo júnior de Roland Garros en 2016, llegó a la final júnior del Abierto de Australia el año pasado y en el circuito de la WTA consiguió llegar a las semifinales de Gstaad en 2016.