Rafa Nadal amagó con irse tras una bronca con el juez

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Rafa Nadal amagó con irse tras una bronca con el juez

Rafa Nadal amagó con irse tras una bronca con el juez

Con el primer set en el aire, el balear protestó airadamente una decisión del juez de silla y amenazó incluso con abadonar la pista del O2. El partido siguió y Nadal ganó el set y el partido.
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Rafa Nadal se ha impuesto a Berdych (7-6, 6-1) y se ha clasificado como líder de grupo para las semifinales de la Copa Masters, donde le espera el local Andy Murray. El partido ha resultado plácido en el segundo set, una vez que Nadal logró quebrar la resistencia del checo, que forzó el 'tie-break' en un primer set muy igualado y de gran nivel de juego y máxima intensidad.

El punto máximo de tensión llegó cuandola resolución de ese primer set estaba en el aire. Berdych mandaba por 6-5 y Nadal sacaba para forzar el 'tie-break'. Con 15-15 llegó la acción polémica. Berdych golpeó muy profundo y Nadal devolvió el golpe dentro de la pista pero levantó el brazo considerando que la bola de su rival había salido de la pista. En ese momento, el juez de silla Carlos Bernardes cantó "out" en el golpe de Berdych, que pidió el ojo de halcón. El sistema electónico dio la razón al checo ya que su bola había tocado la línea. Ahí llegó el problema: Bernardes dio punto y 15-30 (a un paso del set point) para Berdych mientras Nadal consideraba que el punto se tenía que repetir porque él había devuelto la bola y después se paró el juego. El balear se enzarzó en una fuerte discusión con Bernardes al que repetió que le estaba diciendo "una barbaridad" e incluso llegó a amenazar en dos ocasiones con retirarse del partido haciendo incluso un gesto de irse hacia su silla para retirarse de la pista del abarrotado O2.

Sin embargo Nadal se calmó, siguió en el partido, ganó el siguiente punto, el juego, el tie-break y el set que le daba el pase matemático a semifinales y finalmente el partido para asegurarse el primer puesto de su grupo. Además, en ese punto que le valió el 30-30 tras la polémica, jugó con mucha agresividad y lo celebró como si valiera un título. Fue la rabia del campeón que a partir de ese momento ya no bajó el nivel y se impuso con mucha claridad.

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