La FEB ha tenido un año de transición en la presidencia, lo que no ha impedido que los éxitos continúen.
Como ese oro que Iñigo Llopis perseguirá en París y que, tras el televisor, enseñará a ese niño, con o sin discapacidad, todo lo que puede hacer.
El trabajo de base en el balonmano español es encomiable, con conquistas y títulos que luego se trasladan a los mayores. Petar Cikusa es un gran ejemplo.
La RFEM cumple un siglo de vida y entre los logros destacan más de 180 títulos de campeones del mundo y más de 1.700 victorias en distintas disciplinas.
Como buen jugador de sensaciones, cuando él se encontraba a gusto, se sentía y se sabía capaz de derrotar a cualquiera. Nunca se hizo pequeño ante los más grandes.
Los bicampeones mundiales de 20 y 35 kilómetros marcha recogieron el premio AS.
La Eurocopa 2024 puede servir de punto de inflexión para una Selección española que ha mejorado con la llegada de De la Fuente.