En ocasiones, para que algo acabe bien se necesitan como mínimo dos milagros.
PorJuan Tallón
En ocasiones, para que algo acabe bien se necesitan como mínimo dos milagros.
Carlos Sainz estrena su casillero de victorias en Silverstone, un templo de la Fórmula 1, a los mandos de un Ferrari, un coche mítico. Un cóctel mágico en un fin de semana de ensueño.
Carlos Sainz logró este sábado su primera pole en el GP de Gran Bretaña, en Silverstone, un templo de la Fórmula 1. Ahora falta el gran salto: ganar una carrera. ¿Por qué no este domingo?
F1 | SILVERSTONE