Granada y Atlético tienen muchas más similitudes de las que parece. Dos clubes que defienden los mismos colores, uno en horizontal y otro en vertical, y dos lemas que evocan a una misma filosofía: no rendirse nunca. El conjunto nazarí se agarra a su 'Eterna lucha' para no dar nunca un partido por perdido. No desfallecer jamás y luchar hasta el último segundo se graba a fuego en los valores del club granadino. Misma idea que ese 'Nunca dejes de creer' del conjunto colchonero. Esa idea que Simeone ha llevado hasta el límite para conducir al equipo madrileño a sus cotas más altas. Misma filosofía, objetivos distintos.

Simeone ya elogió a la afición de Los Cármenes la última vez que lo visitó. Fue allá por 2019, cuando la COVID aún no había entrado en nuestras vidas. También el pundonor y la entrega del equipo. Sin embargo, mucho ha cambiado el Granada desde entonces. Ha sido un 2021 que empezó como un sueño por Europa y va a acabar respirando tras las últimas victorias que mantienen al equipo fuera del descenso. Está siendo una transición complicada que, parece, está empezando a dar sus frutos. Con una idea de juego más asentada y un Jorge Molina en estado de gracia, el Granada terminará 2021 fuera del pozo. Y, aunque a día de hoy hay un abismo en muchos aspectos, el Granada 'Nunca deja de creer' y hoy cree que al Atlético también se le puede ganar.