La historia madridista de Carlo Ancelotti está plagada de grandes acontecimientos. La inmensa mayoría de ellos son positivos y agradables, empezando por la final de la Champions de 2014. Pase lo que pase en esta segunda etapa del técnico italiano en el banquillo del Madrid, Carletto será para siempre el 'entrenador de la Décima'. Resulta curioso que lo más bonito y lo más feo haya sido frente al Atlético, porque además de la noche mágica de Lisboa hubo también la noche triste del Calderón. Fue el 7 de febrero de 2015 y unos colchoneros totalmente desatados les metieron cuatro goles a unos madridistas apáticos y desbordados. Y para redondear el desastre Cristiano se fue a celebrar a continuación por todo lo alto su 30 cumpleaños.

Todo fue injusto, desde el trato al portugués por algo normal hasta la amenaza de despido que tuvo que soportar Carletto. Cuenta la leyenda que por este resultado el club perdió la confianza en Ancelotti y que aquel día se inició el proceso de separación que culminó en el mes de mayo. No contó para nada haber eliminado al Atlético en cuartos de final de la Liga de Campeonesesa misma temporada. Así que podemos estar seguros de que La historia madridista de Carlo Ancelotti está plagada de grandes acontecimientos. La inmensa mayoría de ellos son positivos y agradables, empezando por la final de la Champions de 2014. Pase lo que pase en esta segunda etapa del técnico italiano en el banquillo del Madrid, Carletto será para siempre el ‘entrenador de la Décima’. Resulta curioso que lo más bonito y lo más feo haya sido frente al Atlético, porque además de la noche mágica de Lisboa hubo también la noche triste del Calderón. Fue el 7 de febrero de 2015 y unos colchoneros totalmente desatados les metieron cuatro goles a unos madridistas apáticos y desbordados. Y para redondear el desastre Cristiano se fue a celebrar a continuación por todo lo alto su 30 cumpleaños.

Todo fue injusto, desde el trato al portugués por algo normal hasta la amenaza de despido que tuvo que soportar Carletto. Cuenta la leyenda que por este resultado el club perdió la confianza en Ancelotti y que aquel día se inició el proceso de separación que culminó en el mes de mayo. No contó para nada haber eliminado al Atlético en cuartos de final de la Liga de Campeones esa misma temporada. Así que podemos estar seguros de que a la evidente motivación que supone un derbi y un partido que puede dejar casi sentenciado el campeonato se va a añadir un tema muy personal hoy en el Santiago Bernabéu.