Cuesta muchísimo entender lo que es ahora el Atlético

Derrota. Cuesta entender mucho a este Atlético, capaz de lo mejor y de lo peor a lo largo de la temporada. Cuesta entender que el equipo rojiblanco lograra lo más difícil, adelantarse en el marcador y que el rival le diera la vuelta en dos zarpazos. Cuesta entender que el equipo encajara otro gol a balón parado y que el Mallorca le pillara descolocado en un contragolpe que fue mortal. Esta siendo una campaña un tanto anómala y el Atlético no logra conseguir la ansiada regularidad. El Mallorca se mantuvo en pie en los momentos complicados y aprovechó su ocasión. El campeón no puede dejarse irse de esta manera. No es de recibo. Ni su afición se merece este varapalo y este mal trago. Hace falta una profunda reflexión para ver lo que está sucediendo.

Análisis. La derrota pone al equipo en una situación complicada en LaLiga. El equipo atraviesa una situación comprometida y el Atlético corre el riesgo de venirse abajo en el tramo decisivo del campeonato. Que el Atlético se ponga 1-0 y que en los últimos veinte minutos el rival le dé la vuelta al marcador, no es normal. Simeone no da con la tecla, pero muchos de los jugadores está ofreciendo un nivel que no es acorde con su categoría. Ahora mismo pelear por el título parece una utopía.

Cunha. El brasileño fue titular por primera vez en la temporada. Cunha lo intentó una y otra vez. Falló alguna ocasión clara, pero lo siguió intentando. Hasta que marcó. Lo hizo de la forma más complicada, metiendo la puntera desde el suelo. Un gol que celebró a lo grande, pues es su primer tanto en el Wanda Metropolitano. Lástima que al final no valiera para nada.

Correa. El argentino jugó ayer su partido 300 con la camiseta del Atlético de ellos en LaLiga. Godín, con 389 encuentros, es el extranjero que más partidos ha disputado con el equipo madrilñeño. Correa se ha ganado el cariño y el respeto de la afición rojiblanca. Por sus goles, por sus regates, pero también por su humildad. Ojalá pueda alcanzar algún día al uruguayo.

Oporto. El Atlético tiene el martes la primera final de la temporada. El equipo de Simeone se juega en Oporto su supervivencia en Champions. No será una tarea sencilla ganar al conjunto portugués, aunque el Atlético está acostumbrado a sacar la cabeza cuando nadie da un duro por él. Tal y como está el equipo parece complicado vencer en Portugal. Y resultaría lamentable ver al equipo fuera de la Liga de Campeones y con pocas opciones ligueras cuando se llegue al parón navideño. Justo en la temporada en la que más ilusión tenía la afición rojiblanca. Hay que volver al inicio, mirarse el ombligo y restaurar el partido a partido de Simeone. Porque así no se va a ningún lado. El campeón no puede arrastrarse así. Lo dicho, muchas veces cuesta entender al Atlético.