El 2021 de Susana Rodríguez estará para siempre en su memoria y en la del deporte nacional. La triatleta gallega, una de las grandes estrellas paralímpicas españolas, se colgó el oro olímpico en Tokio junto a su inseparable guía, Sara Loehr, y además logró un diploma (5ª) en los 1.500 metros. Nadie había hecho este doblete de pruebas en una cita de tal calibre, pero esto no es nuevo en Susana, ya que ha logrado más cosas que antes no se habían producido, como el ser la primera doctora ciega en España. En la pandemia tuvo la opción de no ejercer por su discapacidad, pero todo lo contrario: cada mañana se montaba en un tren a las seis, con el sol todavía sin asomarse, rumbo a Santiago de Compostela.

Con su trabajo, en el programa de asistencia telefónica, cargaba de moral a sus compañeros. Lo pasó mal, como todos, pero sentía que era su deber, como contó en Informe Robinson. Por las tardes, tenía entrenamientos duros con los Juegos en mente. La portada en la prestigiosa revista TIME fue un reconocimiento más por haber conseguido esquivar todo tipo de obstáculos para cumplir sus dos sueños: ser doctora y deportista olímpica, y en ambas con gran éxito. Tras todo el botín cosechado en Japón llegó al Mundial... y también lo ganó. El cuarto. Y la viguesa no se detendrá aquí.