Rebobinemos. 23 de mayo de 2015, el Real Madrid le gana al Getafe en el último partido de Liga de una temporada difícil después de conquistar la mítica "Décima". Ancelotti sabe que le van a echar. Nadie le ha dicho nada pero este viejo sabio que ha conocido mil batallas en el fútbol huele, por el ambiente y por las miradas, que su etapa en la capital de España se va a acabar. Pocas horas después le comunican su despido y Carletto se va con tristeza pero con clase. Una elegancia que algunos, tanto en el entorno madridista como en la Prensa, no muestran entonces a la hora de hablar del míster italiano. Se cuenta que Ancelotti no hace trabajar a los jugadores y, sobre todo, se pone en duda su adecuación al fútbol moderno.

Se clama que "el método de Carletto es anticuado", que no ha evolucionado, que siempre hace lo mismo. Más papistas que el Papa, cierta gente intenta justificar el cambio de técnico ensuciando al profesional cuando él mismo entiende que en un club como el Madrid una temporada sin título es motivo suficiente para tener que irse. ¿Qué van a decir ahora que el "método de Carletto" ha hecho líder al Real Madrid en la Liga y ha permitido un buen comienzo en la Champions League? Con una plantilla con sólo dos incorporaciones en dos años, Ancelotti está haciendo milagros. Pues eso, el "método de Carletto" es adaptarse a cualquier situación. Y ganar.