Fortaleza mental es un concepto que puede sonar como algo manido pero que claramente es el que determina el rendimiento y éxito de un deportista. Solo los mejores han conseguido dominar este arte (o esta ciencia) y las Olimpiadas de Tokio 2020 son un ejemplo. No gana (solo) quien nada más rápido, quién salta más alto o quién suma más puntos. Gana quien, además, supera a sus rivales en una alta capacidad que además de valiosa es ‘entrenable’. Porque sí, la fortaleza mental también se entrena y en este artículo te explicaré cómo.

¿Qué es la fortaleza mental en el deporte?

La fortaleza mental en el deporte es la capacidad de observar y gestionar tus pensamientos, emociones y acciones, para entregar lo mejor de ti y hacer tu mejor juego, en cualquier situación, independientemente del resultado. O lo que es lo mismo, la fortaleza no te ayuda a llegar más rápido -que también-, sino a superar mayores obstáculos, retos y dificultades.

Es lo que distinguió a deportistas de la talla de Vladimir Salnikov, una leyenda de la natación rusa a quien la historia del deporte le debe grandes hitos como su mejor marca en 1.500 metros, conseguida en 1982, un tiempo de 14:37.06. Mientras sus compañeros seguían nadando, él ya se había integrado en el público, esperando a ver quién llegaba en segundo lugar. No era la primera vez que conseguía nadar por debajo de los 15 minutos, hito que todo el mundo se encargaba de recordarle. “Era una presión enorme. Todo el mundo lo esperaba y me lo repetía una y otra vez. Yo sabía que podía hacerlo”, explicaba el nadador.

Pero no todo le vino de cara a Salnikov. Ganó en los JJOO de Moscú 1980, pero sin EEUU entre sus rivales, el deportista sintió su oro como una gesta no completada o descafeinada. No ayudó tampoco a que en Los Ángeles 1984 su país decidiera no acudir como respuesta a lo vivido en Moscú cuatro años antes. Las circunstancias y el tiempo jugaron en su contra. Perdió la confianza de los suyos, considerándolo más como una gloria pasada que no como una punta de lanza con posibilidad de seguir ganando en siguientes citas olímpicas.

Su fortaleza mental, sin embargo, obró el milagro. Fue ella quien le ayudó a superar el descrédito y la desconfianza, el ruido. Su fortaleza mental lo determinó hacia la victoria en Seúl 1988 donde conquistó su segundo oro olímpico siendo el campeón olímpico de más edad desde hacía más de medio siglo. El caso de Salnikov evidencia hasta qué punto para un deportista puede ser crucial entrenar la fortaleza mental como parte de sus rutinas.

Sabemos que, tras persistir y conjurarse para la victoria, lo consiguió, pero, ¿cómo lo hizo? ¿Cómo logró entrenar su fortaleza mental para resurgir cual ave fénix entre las cenizas? La experiencia me dice que si consigues desarrollar tu fortaleza mental no habrá entrenamiento exigente para ti, ni competiciones difíciles. Aquí compartimos algunas claves para entrenar tu fortaleza mental.

Decálogo de fortaleza mental: 10 tips para entrenarla

1. No pienses en marcas y céntrate en objetivos

2. Cambia el sufrimiento por la motivación

3. Convierte el miedo en coraje y valentía

4. Dale a los errores el valor que merecen: aprender de ellos es clave para mejorar

5. Concéntrate en tu resiliencia para recuperarte rápidamente y centrarte en el presente

6. Visualiza cada paso en tu cabeza como si pudieras vivir el proceso

7. Encuentra la manera de aislarte del ruido y la presión extra deportiva

8. Mantén un diálogo interno en positivo huye del fustigamiento y la flagelación

9. Valora todo lo que has conseguido

10. Mantente cerca de los tuyos No solo de fortaleza mental se nutre el deportista.

La confianza es otro instrumento que insufla de power a quien saber ejercitarla. ¿Quieres saber cómo mantener la confianza cuando tu objetivo es superarte en cada entrenamiento o competición?