Thuram, Pléa y Embolo, sus grandes peligros

Rose le da un sello muy 'Red Bull'. Tras haber trabajado seis años en el Salzburgo —cuatro de ellos en las categorías inferiores, ganando una UEFA Youth League, y dos en el primer equipo—, el entrenador Marco Rose ha convertido al Gladbach en otro exponente del tipo de fútbol favorito en la factoría RB: ritmos altos, vértigo, flexibilidad táctica y atrevimiento. Para ello cuenta con futbolistas idóneos, destacando especialmente los tres potentísimos atacantes, ideales para las transiciones: los franceses Marcus Thuram y Alassane Pléa y el suizo Breel Embolo. Los usa indistintamente en todas las zonas de ataque: como referencias, como segundos delanteros e incluso partiendo desde los costados. Es habitual que durante los partidos intercambien varias veces las posiciones, lo cual le permite también a Rose modificar el dibujo táctico.

Rotó a medio equipo. A diferencia del Madrid, el Gladbach pudo permitirse reservar a jugadores importantes en su compromiso del fin de semana. Se medía al Mainz, que aún no ha puntuado, y ganó por 2-3. Sin embargo, Marco Rose tuvo que recurrir a cuatro hombres habituales a los que había dejado en el banquillo ya que el marcador registraba mediado el segundo tiempo un 2-1 en contra. Hofmann, Thuram, Pléa y Neuhaus acabaron jugando algo más de media hora. El lateral izquierdo Bensebaini fue el único que descansó los noventa minutos. Incluso salió como titular un debutante: el centrocampista del filial Rocco Reitz.

Rozó la sorpresa en Milán. Recibe al Madrid tras puntuar en el Giuseppe Meazza en la primera jornada. Un buen resultado (2-2) que pudo ser incluso mejor, ya que Lukaku igualó el choque en el último minuto. No habría sido, sin embargo, un triunfo justo. Tuvo menos posesión de balón y muchas menos ocasiones que el conjunto italiano.

Un doble pivote estable. Los encargados de aportar equilibrio en un equipo que siempre corre el riesgo de partirse por su tendencia al ida y vuelta son dos internacionales alemanes. Uno, Christoph Kramer, fue campeón del Mundo en 2014 (recibió un golpe en la cabeza en la final de Maracaná y fue sustituido en el primer tiempo). El otro, Neuhaus, ha debutado este año 2020 con la selección de Löw. Suya fue la mejor asistencia de la primera jornada de la Champions: un pase raso y profundo desde campo propio que dejó a Hofmann solo ante el portero.

Importancia de los laterales. En el juego por las bandas destacan los laterales, que tienen una gran proyección ofensiva y al mismo tiempo son buenos defensores. Bensebaini, el zurdo, impresionó en el Rennes antes de firmar por un Gladbach en el que está ya tan asentado que incluso es el especialista en el lanzamiento de penaltis. El diestro, Lainer, era importantísimo en el Salzburgo que alcanzó las semifinales de la Europa League en 2018. Cuando se marchó a Alemania, Rose se lo llevó con él.

Un buen portero. El internacional suizo Yann Sommer, que estuvo en la lista del Barcelona hasta el final cuando el club azulgrana acabó contratando a Ter Stegen, es el guardameta titular. Lleva años siendo de los mejores porteros de la Bundesliga