Si esto de Messi en el Barça apuntaba como decían algunos a "su último baile" al estilo de Michael Jordan con los Bulls, nada mejor que abrir la sesión ante Cristiano Ronaldo y La Juventus. El Barcelona y Messi ganaron su última Champions en Berlín en el 2015 ante la Jueventus.

Ahora, con un Barça que llega a la máxima competición tratando de superar el trauma de Lisboa, consecuencia de los traumas anteriores ante Juventus, Roma y Liverpool, enfrentarse a la Juve de Cristiano Ronaldo parece una bella forma de cerrar el círculo.

Es una Juventus por descubrir, un poco como le pasa al Barça de Koeman. Ambos equipos estrenan entrenador y se esperan cambios tras una época en la que han ido apagándose. Los blaugrana más estrepìtosamente que oos turineses, a los que el Scudetto ya les sabe a poco.

El hecho de que la Juventus tocara en el primer bombo evitó al Barcelona tener que encontrarse con los italianos del tercer bombo, que suponían el mayor peligro para complicar el grupo. El Dinamo de Kiev y el Ferencvaros son conjuntos ante los que no te puedes descuidar, pero no deberían evitar que el Barça y Juve, Cristiano y Messi, realicen su último baile. Se lo merecen.