Insistir, insistir y volver a insistir. Simeone ha comentado en numerosas ocasiones que seguirán temporada tras temporada peleando por ese título que tanto se le resiste al Atlético. No queda otra. Un año tanta constancia deberá dar frutos. Y los aficionados rojiblancos esperan que sea este. El equipo colchonero no lo tiene sencillo, puesto que no está entre los más fuertes económicamente de Europa pero sigue en la pelea. Es el gran logro del Cholo: no rendirse nunca y que ninguno de los más grandes (Real Madrid, Barcelona, Bayern, Juventus, Liverpool...) se sientan seguros jugando contra el Atlético.

El equipo madrileño se tiene que reinventar, pero ese poso de conjunto difícil de batir está presente. Hace tres años el Atlético se vio en la misma ronda que ahora. Fue ante el Leicester y los del Simeone pasaron. Sufriendo en el partido de vuelta, pero pasaron. Tres años después ya no están los jugadores más importantes de aquel equipo. Es otra plantilla pero con el mismo reto. Los que han llegado se han acoplado bien y han entendido que este club es diferente, distinto a los demás. Capaz de ganar en Anfield cuando peor lo tenían. Los Juanfran, Godín, Filipe Luis, Gabi, Torres o Griezmann ya no están, pero el espíritu del equipo es el mismo. Y eso es mucho. Porque los de Koke y compañía quieren irse de la entidad haciendo historia.