El espíritu guerrero de Carvajal

Viendo el nivel de Carvajal es humano y comprensible que Achraf prefiera hacer las maletas y marcharse al Inter que pelear por un puesto con el dueño del lateral derecho del Madrid. Dani empezó el partido revolucionado, sosteniendo un duelo precioso con Cucurella y haciendo un penalti que el árbitro le perdonó, pero fue capaz de superar todas las adversidades que se le presentaron durante el choque para acabar protagonizando la jugada decisiva del encuentro.

En un partido de pierna dura y en el que no vale la duda, Carvajal se creció a medida que el cansancio hacía mella en el equipo azulón. El de Leganés es el heredero natural del brazalete y del espíritu de liderazgo que lleva años cultivando en la caseta de Valdebebas su amigo Sergio Ramos. La filosofía de un club que perdona las malas rachas y los malos momentos, pero que exige que en cada aparición la camiseta se empape de sudor y dignidad. Y en eso Carva va sobrado.