La hora de la verdad

Semana de vértigo. Cada temporada, cuando asoma la fase de eliminatorias de la Champions League, comienza el momento cumbre del curso. El Real Madrid afronta una semana de vértigo, de todo o nada. El sorteo le emparejó con un rival de su nivel y en el campeonato doméstico mantiene un duelo cerrado en un puño con su máximo rival, el Barça de Messi, que visita el domingo el Bernabéu con la posibilidad de alejar a los de Zidane a cinco puntos más el goal average si ganan.

El Pep más vertical. Vamos a meter el bisturí en el equipo de Guardiola. Quizá sea el año en que su equipo practica un juego menos posicional. Quiere dominar con la pelota, pero si puede atacar rápido lo hace, no como años atrás, cuando le gustaba más que el bloque fuera viajando junto al balón e ir sometiendo a su rival cerca de su portero. De primeras, hay que estar muy atento a Ederson, es capaz de poner el balón por detrás de la línea defensiva rival con sus saques. Los citizens ya han conseguido algún gol gracias a esta situación, mucho ojo al presionar alto.

La presión. En la eficacia en el robo cuando se posicione en bloque medio-alto está una de las claves para el Madrid. El City no resulta del todo fino cuando construye, tiene pérdidas si se le presiona bien y le cuesta defender en transición. También sufre en la defensa de centros laterales a la espalda del segundo central. En estas dos situaciones es algo vulnerable. En cambio, si supera esa presión es capaz de encontrar a Sterling, De Bruyne o Bernardo Silva, acelera y en dos pases se plantan en el área rival con máximo peligro. También me parece el mejor equipo de Europa atacando bloques bajos. Sometiendo al rival, se posiciona en un 1-2-3-4-1 con los laterales cerrados para tener diferentes alturas de pase, ayudar mucho en evitar contraataques y cortar por dentro en profundidad buscando esas zonas "indefendibles" de las que habla Guardiola. Tiene muy buenos conceptos para atacar en espacio reducido, con gran velocidad, dinamismo y aprovechamiento de las bandas, buscando mucho tanto el centro como el pase atrás para la segunda línea.

Los córners. Los defienden en zona y los futbolistas encargados de proteger el primer palo no son demasiado activos. El Madrid es muy poderoso en este apartado y debería aprovechar, con buenos lanzadores, para castigar esa defensa zonal. Es un partido de altura entre dos grandes