Murthy se hace un lío explicando las salidas de Mateu y Marcelino

Anil Murthy acudió a la Junta de Accionistas sin una respuesta concisa a la salida de Mateu Alemany y Marcelino. El presidente se limitó a decir que hubo disparidad de criterios en cuanto a la planificación de la plantilla y rehusó entrar en detalles. Su argumento para no hacerlo, y aquí radicó el error de planteamiento, es que no quería "dañar la imagen" de ambos profesionales. El verbo "dañar" lleva implícito, o cuanto menos lleva a la interpretación, de que Alemany y Marcelino habrían hecho o propuesto algo negativo para el club.

La disparidad de criterios, en sí misma, no es negativa. A uno le puede gustar la paella y a otro el cocido y decirlo no daña el gusto de nadie, aunque sí pueda ser causa de divorcio. Sin embargo, el Valencia, como reacción a las críticas vertidas por su falta de claridad en sus respuestas ante los accionistas, ha emitido un comunicado en el que, si bien reconoce la trayectoria del ejecutivo y entrenador durante dos años exitosos, vuelve a tropezar en la misma piedra e insiste en recalcar que no entra en detalles para "no alimentar ningún tipo de polémica o cruces de declaraciones que puedan dañar la imagen de los profesionales que formaron parte del Club". Tal ambigüedad es lo que realmente daña la imagen de Alemany y Marcelino porque es lo que da lugar a interpretaciones, dimes y diretes y eso se ha fomentado desde el club.