En plena crisis. El Lokomotiv ha llegado a Madrid sumido en una dinámica muy negativa que le ha hecho despegarse de la pelea por el título de la liga rusa y quedarse sin opciones incluso de optar a la tercera plaza del grupo en la Champions. Sumando ambas competiciones, ha ganado sólo uno de sus diez últimos compromisos. Este sábado cayó por 4-0 en el campo del Arsenal de Tula, con lo que se quedó ya a 11 puntos de un Zenit al que llegó a tener a tiro de piedra hace poco más de un mes.

Y mañana, vacaciones. El del Metropolitano es el último partido oficial del Lokomotiv en 2019. El siguiente será el 1 de marzo en San Petersburgo frente al Zenit. Es otro detalle, junto a la falta de estímulos competitivos, que lleva a pensar en una versión poco intensa del cuadro de Yuri Semin, probablemente más deseoso de retirarse a descansar y reflexionar que de emplearse a fondo ante un Atlético sí necesitado.

Compitió bien frente a la Juventus. Va a acabar último de grupo como el año pasado, pero la Champions del Lokomotiv ha sido esta vez más digna. Ganó en Leverkusen, se adelantó en Turín contra la Juventus y perdió los dos encuentros contra el gigante italiano en los últimos minutos.

Sin los más famosos. Jefferson Farfán y Joao Mario, los jugadores más mediáticos de la plantilla rusa, no están en condiciones de jugar y se perderán el partido por lesión. Semin tampoco podrá alinear al centrocampista Barinov, sancionado. El técnico esperaba poder recuperar al portero Guilherme, brasileño nacionalizado que es el actual titular en la selección rusa y ausente en los dos últimos compromisos ligueros. Finalmente ha tenido que viajar sin él, por lo que repetirá bajo los palos Kochenkov, que ha encajado seis tantos en estos dos duelos.

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El martirio desde las bandas. Al Lokomotiv le están haciendo mucho daño en acciones de remate tras envíos desde los costados. El Arsenal de Tula abrió el camino del triunfo con dos cabezazos tras jugadas de este tipo, un déficit recurrente y que no debería darse con tanta frecuencia en un conjunto que defiende con tres centrales o con un medio centro defensivo muy cercano a la línea de cuatro. Semin lleva alternando entre los dos dibujos durante toda la temporada, pero ninguno de los dos le acaba de aportar una seguridad defensiva que en otros tiempos había sido una de sus señas de identidad.

Smolov sigue apagado. Para muchos es el delantero ruso con más calidad, pero Fedor Smolov sigue, como ya le ocurrió el curso pasado, en un tono desesperadamente bajo. No marca desde septiembre, suma sólo tres goles en lo que va de liga y el portugués Éder le está quitando el sitio en los últimos partidos.

Dos amenazas en segunda línea. Aleksey Miranchuk se perdió el partido de ida por lesión y su aportación goleadora llegando desde atrás no puede subestimarse. A esta faceta se ha sumado de forma sorprendente el polaco Krychowiak, que lleva, entre liga y Champions, nueve tantos en el presente ejercicio. Ambos se ubican por detrás del delantero.