“¿Cuánto os va a durar Imanol en la Real?”. La pregunta me la hacía es la zona mixta de San Mamés el pasado viernes un compañero que cubre al Athletic y al que le tengo en muy buena consideración. Obviaré el nombre. No viene a cuento. El caso es que la pregunta en cuestión pilló por sorpresa, no me esperaba la pregunta, porque a pesar de la decepcionante primera parte que hicieron los nuestros en San Mamés, no creo que sea para ser catastofrista. Es verdad, yo estoy todavía como tú, tan sorprendido como desilusionado por lo visto en el derbi vasco. Pero lo considero simplemente un traspiés. Un golpe duro, es cierto, de los que hacen daño, y del que más nos vale aprender pronto y sacar las necesarias conclusiones sin pérdida de tiempo. Pero creo que hay que ir más allá. De verdad.

Ni enterremos a Imanol Alguacil tan pronto. Ni se lo merece, ni nos conviene hacerlo. Abrir ese debate con sólo tres jornadas me parece absurdo. El entrenador de Orio es seguro el más fastidiado de todo el entorno realista por la imagen dada por nuestros jugadores. Seguro. Nadie siente como él la Real Sociedad. Sufre por la Real, vive por la Real, morirá por la Real. Y ya estará dando vueltas para ver cómo evitar que algo así vuelva a suceder. No tengáis duda. Y con su carácter estoy convencido de que lo conseguirá. Imanol es especialista en salir al rescate de la Real. Ya lo hizo dos veces cuando pintaban bastos, y ahora, cuando todo lo vemos negro por la derrota en el derbi, lo volverá hacer. Con la misma decisión. Por eso no es sospechoso, por eso confío, y por eso me parece injusto hacer esa pregunta, seas de Donostia, Bilbao o cualquier otro lugar, sigas o no de cerca a la Real.

Entiendo que dudes sí ves la versión tan floja de la Real de San Mamés en los primeros 45 minutos. Entiendo que sigas sorprendido y decepcionado por la puesta en escena de la Real, sin chispa ni fútbol, arrollada por un Athletic que sólo necesito de intensidad para doblegarte. Todo eso lo entiendo. Yo tampoco lo concibo. Pero no volverá a pasar, ya lo verás. Aprenderemos de esta dura lección, quiero pensar que nos vendrá bien, como decía el propio Imanol tras el derbi. Y lo creo porque no podemos caer en el error de empecinarnos en jugar en corto todo el rato cuando el rival te plantea una presión tan alta e intensa como el Athletic. Hay que variar y jugar en largo, para hacerle dudar al rival; más cuando tienes argumentos para poder hacerlo. Y ahora los tenemos. Ojalá no me equivoque, porque el futuro depende de tengamos bien aprendida esta lección. Y levanta el ánimo, no nos engañemos, llegar al parón con un triunfo, un empate y una derrota después de tres primeras jornadas fuera de casa no es un mal balance. ¿Mejorable? Por supuesto. Pero antes de empezar muchos lo hubieras firmado.

PD: Que Willian Jose no haya empezado fino la temporada lo comprendemos todos. Ha tenido problemas físicos que se seguro han tenido su incidencia. Le condenemos el beneficio de la duda. Se lo ha ganado. Y confiamos en que irá a más. Pero lo que no acepto es la imagen que dio en el momento del cambio por Isak en San Mamés. Su actitud no es digna de alguien que lleve el escudo de la Real. Le entiendo. Está frustrado, él mejor que nadie sabe que no está bien. Pero eso no le permite ir andando cuando su equipo pierde, anteponiendo su enfado a los intereses de una Real que necesitaba este cambio. Ni tampoco le permite hacer esos gestos de desaprobación al abandonar el campo. Aprecio al brasileño, y valoro todo lo que nos ha dado, pero espero qué él también aprenda de lo ocurrido.