James, seguro y barato

El Madrid pide cuarenta y dos millones por James. Si tenemos en cuenta lo que se está pagando este verano por algunos jugadores de menos categoría, podemos decir que el colombiano es una de las mejores ofertas del mercado. Puede que a sus veintinueve años ya no esté para liderar un proyecto, para ser la franquicia de un equipo, pero está en plena madurez para ser uno de los mejores complementos de ataque. Su calidad está contrastada, con una gran visión de juego y un pase de precisión milimétrica, podría darles el salto de calidad que necesitan muchos equipos. El último año en el Madrid, jugando poco y saliendo casi siempre desde el banco, marcó once tantos y repartió doce asistencias. No hay suplentes con esos números que estén a la venta. No es que él vaya a aceptar ni mucho menos ese rol, luchará por la titularidad, pero para un entrenador mirar al banquillo y tener a James es una bicoca porque te puede dar soluciones en el enganche y en todo el frente de ataque.

El volante se quiere quedar en Madrid, al Atlético le vendría de perlas para mejorar ofensivamente. Jugando a la contra, se convierte en un lanzador perfecto, capaz de ponerle un balón largo, templado y medido, a la carrera de los delanteros. Ante defensas cerradas tiene desborde, un buenísimo disparo y sus centros con el cañón que tiene en la zurda son muchas veces medio gol. ¿Y al Madrid? En el Madrid hay quien cree que, quitando a Hazard, no tienen un jugador como James. Habrá muchos jóvenes con más proyección pero el colombiano les gana a todos en experiencia. Lleva jugando muchos años en la élite y sabe lo que es ser estrella y estrellado. En el Bayern corrió como un currante más y ese espíritu no lo va a perder. Y ya lo dijo Zidane, es un jugador que ahora está de vacaciones, cuando vuelva, veremos.