Una subida "impegnativa"
El léxico del periodismo deportivo especializado en ciclismo suele usar italianismos fáciles de comprender para un hispanohablante, dada la cercanía de las dos lenguas.
Se habla así de "volata", como alternativa al anglicismo "sprint" para las llegadas masivas o para la disputa final entre un grupo de escapados. Y de "maglia" en vez del galicismo "maillot", que en español se puede decir "camiseta" o "malla" (término definido en el Diccionario como "prenda de vestir elástica, fina y ajustada al cuerpo"). Y de "grupetto" como equivalente del grupito de escapados.
Casi todas esas expresiones se entienden sin saber italiano.
Últimamente escuchamos también en las transmisiones de ciclismo (lo tomo al oído de Eurosport) el término "impegnativo" o "impegnativa".
En italiano, "impegnativo" (pronunciado "impeñativo") es aquello que resulta desafiante, difícil, exigente. Es decir, que requiere nuestro empeño. Y así se habla, por ejemplo, de "misure politiche impegnative" (o "medidas políticas que requieren un esfuerzo"; donde "impegnative", acabado en "e", es el plural femenino).
Pero muchos espectadores que sí entienden "volata", "maglia" o "grupetto" se habrán quedado extrañados ante este nuevo vocablo. El contexto puede ayudarles, porque se suele hablar de "una llegada impegnativa" o "un puerto impegnativo", y a continuación se ven una llegada o un puerto de cierta dificultad.
Y también les ayudará el latín, claro.
Tanto el vocablo "empeño" en español como la palabra italiana "impegnativo" se vinculan en el origen con "in pignus" (en prenda), que significa "compromiso" cuando nos referimos a la acción de dejar algo en una casa de "empeños" para obtener un dinero, porque eso crea una obligación: nos comprometemos a pagar el principal y los intereses si queremos recuperarlo. Y nuestro verbo "pignorar" ("dar o dejar algo en prenda"), muy usado en el lenguaje jurídico, es de la misma familia que "empeño", y se relaciona con "pignus-pignoris" ("garantía", "fianza").
Así pues, empeñar algo consiste en dejarlo como prenda hasta que nuestros ingresos nos permitan devolver el dinero que nos hayan prestado con ese aval. Y todo empeño implica una exigencia.
Por eso "empeño" significa también para nosotros "tesón y constancia". Acometemos un empeño, tenemos empeño en algo, nos exigimos cumplirlo.
Y ahí hallamos una alternativa para esa expresión italiana que se va adentrando en el léxico deportivo: una cuesta o una llegada impegnativas ("impegnative" en italiano) pueden ser una cuesta o una llegada exigentes. Y desde luego, también disponemos de más posibilidades: llegada sinuosa, cuesta empinada, puerto dificultoso, final difícil, montaña desafiante… En español siempre hay donde elegir.