Tras la piel del adiós de Rubi

Rubi se marchó con un comunicado duro y extenso en el que intenta rebatir muchas de las acusaciones que han caído sobre él como lluvia torrencial en estos diez días de silencio. La estrategia de comunicación del técnico ha sido equivocada desde el primer día, seguramente mal asesorado y sin saber cómo abordar un adiós que se ha cocido a fuego lento y que ha sido traumático. Dejando a un lado la torpe marcha del técnico y cómo se ha erosionado su figura en el Espanyol, el texto de Rubi también apunta otras realidades, algunas de ellas ya explicadas en AS.

La primera de ellas, que Chen no se va a mover de su plan de austeridad, priorizando recuperar su deuda a invertir en el equipo. Lejos quedan aquellas palabras de Champions del comienzo, sino que de nuevo el Espanyol deberá armarse gracias a desarmarse, deberá cambiar cromos, nunca seguir completando su álbum. Por otro lado, cómo un club como el Betis, que no acude a Europa, es capaz de seducir a Rubi con más dinero y con más recursos para configurar su plantilla, cuando es el Espanyol el que ha completado mejor temporada. Quique se desencantó tras el primer año porque no se le dijo la verdad. A Rubi no se le ha engañado pero él ha decidido irse por los motivos que ustedes prefieran. Más allá de Rubi, toca hacer autocrítica.