¡Vaya dos años que lleva la Maratón de Madrid justo después de haber celebrado su 40 Aniversario! ¡Qué cenizo! Si en la pasada edición tuvo que rediseñarse, corre que te corre, después de que el Ayuntamiento de Madrid le instara a cambiar el recorrido, tras un informe medioambiental que desaconsejaba su presencia en El Retiro; en el presente 2019 se ha visto obligada a buscar una nueva fecha y adelantar en un día sus tres carreras, debido a la convocatoria de Elecciones Generales para el 28 de abril. Tener a 39.000 personas corriendo por Madrid en la misma jornada de la votación podía crear serios problemas de seguridad y movilidad. La medida es lógica, pero una faena para la organización de Mapoma, que ha sido capaz de reaccionar en tiempo récord, igual que ya hizo el año pasado.

Dentro del incordio del cambio se encontró la mejor solución posible, que es celebrarse el sábado 27, pero aun así ha deparado consecuencias adversas. De momento se han dado de baja más de 3.000 atletas, y se estima que una cifra similar no se inscriba por la misma razón. La mayoría son personas de fuera, que han visto trastocados sus planes de viaje. Esas inscripciones perdidas y otros gastos colaterales supondrán en torno a medio millón de euros menos de ingresos. Este miércoles, justo a falta de un mes para su disputa, la plana mayor de la Maratón nos visitó en la redacción de As, donde relataron esas piruetas para sacar la carrera adelante, pero también nos recordaron que son un motor de riqueza para la capital, con un impacto económico de unos 30 millones de euros. Merece la pena cuidarla.