Cantoria: el mármol, las carretillas de San Antonio y la inspiración de la Octava

Río Almanzora. Cantoria está a 92 kilómetros del aeropuerto de Almería, en el llamado Valle del Almanzora, el río que pasa por esta zona que engloba a otros pueblos como Albox, Olula del Río, Partaloa, Fines y Albanchez. El pueblo cuenta con 3.251 habitantes censados, pero antes de la Guerra Civil doblaba la población y llegó a ser Partido Judicial. La recesión la está solucionando Purificación, la alcaldesa (¡muy madridista!), que ha incentivado a la población joven de Cantoria a través de una red de instalaciones deportivas de primer nivel. Los vestuarios del equipo de fútbol, recién reformados, son dignos de nuestra Primera División: "Es gracias a los materiales de Cosentino, que mantiene ocupado laboralmente a buena parte del pueblo". El mármol de Macael, junto al silestone y el dekton, logran que la población no tenga que vivir sólo de los productos del campo, donde mandan los cítricos sembrados en las laderas del río. Y si tiene usted libre el 16 de enero pásese por Cantoria. Así vivirá la fiesta pirotécnica de Las Carretillas, en honor al patrón del pueblo: San Antonio Abad. En su origen las carretillas eran de caña, liadas con cuerda y rellenas de pólvora. Eran muy peligrosas. Ahora se hacen con cilindros de cartón, mucho más duros y seguros. Mejor para todos.

La peña. Todo empezó en el año 2000. Los vikingos de Cantoria, donde son mayoría, disfrutaron en los bares del pueblo de La Octava, con aquel gran triunfo en París en la final con el Valencia (3-0). Nos los cuenta el actual presidente, Ramón Linares: "Estábamos tan felices con la segunda Champions en tres años que decidimos organizarnos como peña". Lo más divertido es cómo se diseñó el nombre de la peña: 'La Décima' de Cantoria. Entre ellos dijeron que sería el no va más el día que se conquistase la Décima, algo que veían muy lejos. "Pero mira, nos hemos liado y ya vamos por la 13. Esto ha superado todos los sueños de los cantorianos madridistas", nos dice Ramón. Actualmente tienen 142 peñistas afiliados, que pagan religiosamente su cuota de 36 euros al año (sólo tres al mes, un par de cañas). No tienen sede fija y viajan un par de veces por temporada al Bernabéu para animar al equipo. Te cuentan tantas anécdotas que necesitaría diez páginas para reproducirlas...

Noveles. Pude visitar el Colegio Público Urbina Carrera y aluciné con lo que viví durante hora y media. Casi 200 críos (de 5 a 14 años) me recibieron con un cariño que me llevaré para siempre en el corazón. La directora, Ana, me recibió con la bandera de España y del Real Madrid rodeada a su cintura: "Hay que orientarles desde pequeños...". Olé.