Liberté, Égalité, Mbappé...

Todo el mundo pregunta lo mismo: ¿A quién fichará el Madrid? Me refiero a fichaje-trueno, una categoría que no alcanzan ni Hazard ni De Bruyne ni ningún otro que no sea Mbappé o Neymar, descontado obviamente Messi. De Neymar ha hablado Florentino en términos elogiosos, incluso aumentó el enfado de Cristiano cuando dijo estas Navidades que en el Madrid ganaría el Balón de Oro con facilidad. Pero a Neymar le está mejorando el sueldo el PSG, que no querrá soltarlo al año de ficharle, y por otra parte el Mundial no le ha hecho ningún bien. Llegó mal repuesto de la lesión y se ha distinguido por sus pamplinas y ñoñerías.

Queda Mbappé. Florentino ya le quiso el verano pasado, él estuvo dispuesto a venir, pero no se dio porque no salía nadie de la bbC y él no quería estar en la cola. Florentino no quiso desprenderse ni de Benzema ni de Bale, sus protegidos, y Mbappé prefirió el PSG, donde se veía con plaza de titular. El problema ahora, me cuenta Hermel, es que se ha convertido en algo así como un bien de Estado. Hace furor una camiseta con la leyenda ‘Liberté, Égalité, Mbappé’, hasta ahí llegan las cosas. Parisino, además, es orgullo de la ciudad y del país entero. “Sacarle sería como sacar la Torre Eiffel o el Louvre”, me dice, medio en broma medio en serio.

Y Florentino se anda con pies de plomo con el Emir de Qatar, ya se ha visto en esos rápidos desmentidos (es lo único por lo que los hace) cuando se ha hablado de tratos del Madrid con algunos de los dos jugadores. Aun con todo y eso, hay quien aún tiene la esperanza en el club de que Neymar, que se fue a París huyendo de Messi, se vea ahora con una competencia próxima igual de firme. Mbappé es campeón del mundo, tiene la Legión de Honor con 19 años, aspira al Balón de Oro... Quién sabe, quizá Neymar pueda pensar ahora que donde tiene mejor hueco es en el Madrid. Lo malo es el cante que ha dado en el Mundial.