Un europeo en el clásico de Europa

Profesionalmente, Peter Tempel respira Europa. Así fue cuando trabajó en la dirección general para el continente del Ministerio Federal de Relaciones Exteriores de Alemania o cuando ejerció en la Representación Permanente de dicho país ante la UE. Un Bayern-Real Madrid también nos sabe a Europa, porque hay pocas postales del mejor fútbol continental en el que no asomen Di Stéfano, Puskas, Gento, Santillana, Beckenbauer, Hoeness, Maier o Rummenigge. Todos sus nombres surgieron, ya fuera en el aperitivo o a los postres, durante la conversación de ayer. Fútbol a 48 horas del verdadero fútbol.

Dentro de una semana, el señor Tempel deberá mostrar su cara más diplomática, la que le va en el cargo, en el palco del Bernabéu. Asistirá al partido de vuelta entre el Real Madrid y el Bayern, que es su Bayern aunque sus primeras patadas a un balón las diera de chaval en Colonia. Luego se hizo aficionado de ese equipo que es el equipo de Baviera y también punta de lanza de toda Alemania cuando el trofeo que está en juego es el de la Champions. Por un momento se habló de Nadal, también de Schumacher o de Vettel, héroes germanos en un país de coches, pero finalmente todos los ríos llegaron al mismo mar: a ese Bayern-Madrid que es tan europeo como el pasaporte color vino que te permite viajar desde Palma o Frankfurt.