España regresa contenta de Alemania

Contentos sin presumir. España sacó un empate de prestigio en Düsseldorf, en la guarida de Alemania, campeona del mundo, primera del ránking FIFA, favorita en las apuestas para Rusia. Digamos que Alemania no fue mejor que España, aunque nos metió algún arreón y puso a prueba a De Gea, que con dos paradas estupendas contribuyó al resultado. Pero también en la portería de Ter Stegen hubo un par de situaciones dramáticas, que se escaparon por poco. En todo caso, lo mejor del partido lo hizo La Roja, que durante casi toda la primera parte exhibió ese juego tan característico suyo de presión arriba y precisión en el toque.

Faltó Busquets, y su posición la ocupó Thiago, en el que se iniciaba todo con mucha pulcritud. Luego, ya saben: Iniesta, Isco y Silva bordándolo, hasta que aparece pase. Pronto llegó el gol, con un envío perfecto de Iniesta a Rodrigo, que está en un sensacional estado de forma, y marcó. Luego siguió el baile, aunque, como suele ocurrir, con poca prisa para el gol. A cambio, Alemania amenazaba por la izquierda, donde a Carvajal le solían coger dos a uno. No jugaba bien del todo Alemania, pero tenía ese peligro sordo tan suyo. Lo plasmó Müller, con un tirazo cerca del descanso desde la ‘zona Busquets’. Pensé que con él ahí eso no hubiera pasado.

La segunda mitad fue mejor Alemania, pero sin abusar. Iniesta dejó su sitio, luego Isco... El equipo tenía que cambiar forzosamente. Cambio a cambio, acabó con una fórmula menos sutil pero que puede resultar más rápida y contundente, y que me figuro que Lopetegui reservará para partidos apretados: Lucas Vázquez y Asensio por los lados y Diego Costa en el eje del ataque. Digamos que una vez instalada esa fórmula España terminó bien, incluso amenazando. En definitiva, el partido deja buenas sensaciones. Puso a prueba dos fórmulas y permitió comprobar que en Rodrigo hay un delantero tan a tener en cuenta como al que más.