El Camp Nou y el Espanyol

“Vuelve el derbi catalán a Primera”, rezaba una pancarta que desplegó la grada de animación del Barcelona el sábado, durante el transcurso del primer encuentro ante el Girona en el Camp Nou. Un mensaje de muchos significados. Uno de ellos destacar que el Espanyol no es un club catalán, y no ya de fuera de Barcelona, como se encargó de señalar Gerard Piqué, unas declaraciones que fueron investigadas.

Un mensaje que iba a colación con las palabras del mismo Piqué después del 1-1 jugado en Cornellà-El Prat hace una semanas, cuando dijo aquello de que no sabía si el Espanyol era de los chinos o de... Tabarnia, en clara mofa a la entidad perica. No es la primera pancarta en el Camp Nou que hace referencia a la propiedad y a la catalanidad del Espanyol, club fundado por estudiantes barceloneses en 1900. “El Espanyol es de los chinos”, un cántico repetido en los últimos dos años.

En los últimos meses, y después del clima de controversia política, ha crecido la corriente en la grada azulgrana de desligitimar la catalanidad blanquiazul, club que ha mantenido su carácter “apolítico”, mientras que el Camp Nou se ha convertido en un escenario reivindicativo de una parte de la sociedad catalana.

Lejos de ofender, la pancarta del sábado refleja que el Barça sigue pensando en el Espanyol como el Espanyol lo hace en el Barça. Y eso es un derbi por definición.