Meritorio. Reapareció el Madrid conquistador de la temporada pasada y oprimió al Deportivo con una goleada terapéutica. El conjunto de Zidane restableció su eficacia, estrujó a su rival y recuperó hasta 34 balones en campo deportivista (diez robos en los primeros 25 metros gallegos).

La evolución. Este balance de recuperaciones en zona alta da a entender la aplicación sin balón de todo el equipo. Frente a Barcelona y Villarreal, sus dos últimos partidos como local en LaLiga, sólo interceptó siete balones cerca del área contraria. 

Los laterales. Lucieron Carvajal y Marcelo, metidos en terreno de juego deportivista y ágiles en la activación tras pérdida. Fueron los primeros en importunar la salida del Deportivo (12 recuperaciones del español). Donde no llegaban ellos emergía Casemiro.

En todas partes. Las coberturas del brasileño a Marcelo, Carvajal y Varane garantizaron generalmente la seguridad blanca. No se hundió en la presión, deje que le acecha en algunas ocasiones, y su respuesta defensiva resultó inmejorable.

Ayuda de Bale

Implicación del galés en el repliegue en el minuto 33. Cerró el paso a Juanfran con una entrada inteligente.

Anticipación de Nacho

El central aprovechó un mal entendimiento entre Mosquera y Lucas para cortar una entrega gallega y empezar la jugada del 2-1 de Bale.