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MOTOGP | JAPÓN

Miller: “He llorado como un bebé en la vuelta de celebración”

“Como estaba rodando solo al final, el único hombre a batir era el que tienes en la mente y hay que tratar de no escucharle mucho”, dice.

MOTEGIActualizado a
Miller junto a su pareja en la parrilla de Motegi.
Mirco Lazzari gpGetty

Caen bien en el paddock las victorias de Jack Miller en MotoGP. El australiano saltó directamente de Moto3 a MotoGP en 2015 y no es habitual verle en lo más alto del podio como ha hecho en este GP de Japón, con la consiguiente celebración suya de beber directamente el champán desde su bota.

Así explicó el australiano su victoria en la carrera más rara del año, entre otras cosas porque pocos contaban con él para la victoria partiendo séptimo desde la parrilla: “Ha salido todo mejor que lo planificado. Me he sentido fuerte todo el fin de semana, incluso ayer, por eso me sentí decepcionado con el séptimo de la ‘qualy’. Sabía que tenía buen ritmo por la sesión del viernes, e incluso esta mañana también lo he tenido con el neumático duro. Pude remontar muy rápido y cuando me puse en cabeza, sabía dónde tenía que apretar y he imprimido un fuerte ritmo”.

El de Ducati cree que la elección del neumático trasero duro fue clave en su primer triunfo del año: “Era difícil la elección, porque todos optaban por el medio, pero utilicé el duro en el wam up y me sentí bien de inmediato. A diez vueltas del final tuve que gestionar bien la recta, porque el neumático tenía mucha caída, pero creo que lo hice bien de principio a fin”.

Y en cuanto a sus sensaciones al cruzar la línea de meta, no puede sorprender que se haya emocionado como lo ha hecho, porque no ha sido un año fácil para él, sabiendo hace tiempo que no seguirá en Ducati y buscándose acomodo en KTM para el próximo año. Esto sintió: “Ha sido muy emotiva esta victoria. He llorado como un bebé en la vuelta de celebración, no sabía que tenía eso dentro de mí. Como estaba rodando solo al final, el único hombre a batir era el que tienes en la mente y hay que tratar de no escucharle mucho y no cometer errores”.