“Están pasando cosas y no sé si se me está yendo la pinza”

La cuenta atrás para conocer al ganador de este Dakar ya ha comenzado y Tosha Schareina es uno de los pocos privilegiados que ha sido capaz de llegar a esta segunda semana de carrera con vida en la lucha por el Touareg. La regularidad del español está siendo una de sus mejores bazas en esta carrera donde, en cada visita a la caravana por parte de la Prensa española, siempre se ha repetido la misma celebración: el haber sobrevivido otro día más al desierto. Hasta ahora parecía algo habitual pero en la sexta etapa, las bajas de Branch y Cox demostraron que los peligros no han desaparecido y con una victoria en juego, tampoco es necesario salir a buscar los límites.

De por sí, “puedes tener cualquier plan que cuando te subes a la moto cambia todo”, dejaba claro Tosha, tras un día donde las cartas se han movido a su favor. Pues el español recortó terreno con Sanders en la general y bajó su diferencia hasta los doce minutos, gracias a la estrategia que adoptó el australiano: “Sabía que él no estaba apretando mucho. Además, si ha visto que Ross (Branch) se ha caído, que iba tercero, y yo que voy segundo estaba ahí, estaba un poquito esperando a ver si lo pillaba para rodar juntos y no perder muchos más minutos. Pero ha visto que no lo alcanzaba y creo que ha bajado el ritmo. Es buena estrategia, tiene un margen bueno y se lo puede permitir”.

Parte de ese margen ha llegado después de que en la jornada de descanso, al piloto de KTM le anulasen una sanción de ocho minutos (por exceso de velocidad), que ahora pondría a dos pilotos separados por tan solo cuatro minutos en la general. Pero ante los errores que han reportado desde la marca austriaca en el roadbook electrónico de su piloto, Sanders siempre ha salido beneficiado. Y aunque Schareina está “conforme con que le devuelvan el tiempo a él... y a quien sea cuanto toca”, la manera en la que se está gestionando hace que el español señale las decisiones: “Parece que solo él tiene el privilegio y todos estamos teniendo problemas con la tablet. No tengo nada en contra de Daniel, al revés, que se devuelva a todo el mundo que está teniendo problemas. Pero hay que hacerlo ya sea Daniel, seamos nosotros o sea quien sea”.

“No sé si se me está yendo la pinza”

Los contratiempos con la tablet no han dejado libre a ningún piloto, incluido Schareina que llegó a dudar de su navegación: “Hoy sí que es verdad que, no sé si he tenido un fallo en el ‘roadbook’. Han habido dos o tres veces, que parece que se me quedaba pegada la página, porque me quedaban muchos metros para llegar al waypoint y se me abría mucho antes. Están pasando cosas que no sé... Ya no sé si es error mío o si es de la tablet, y te hace un cacao mental, pero no sé si me está yendo la pinza. En Marruecos ya sufrimos de eso, y parecía que no iba a pasar más, pero parece ser que sigue pasando”. Pero a pesar de todo “ha ido bien el día” para el piloto de Honda, que salió a empujar desde el principio hasta que intuyó el peligro: “La segunda parte ha sido muy loca, con muchos coches locales, todo 100% arena, con algo de dunas... Ahí he intentado empujar también, pero he visto lo peligroso que estaba e intentado solo llegar a meta”.

¿Qué le espera en ese segundo asalto frente a Sanders? “Nunca se sabe, a ver mañana qué encontramos, pero por supuesto que él apretará saliendo tan atrás. Parece ser que mañana también son muchos kilómetros, creo que han recortado (en 50 kilómetros) y ya veremos qué pasa. Sabemos que también habían dicho que iba a ser navegación difícil, así que estará ahí cuarto o quinto, yo creo que será buena salida”, explicaba Tosha, de cara a una séptima etapa sobre la que David Castera, director de la carrera, ha sido claro: “No son vacaciones”. Y mucho menos para el piloto que se está jugando el Dakar.