Loeb correrá el DTM en 2022

Dakar, Mundial de Rallys, aspirante al título de Extreme E y piloto parcial en el WRC. Quizás parezca demasiado, pero no lo es para un Sebastien Loeb que sigue ampliando horizontes deportivos que ahora le llevan hasta el DTM. El francés ha sido confirmado como tercer piloto del equipo Red Bull Alpha Tauri AF Corse y tendrá su estreno en la prueba de apertura del campeonato en Portimao los días 30 de abril y 1 de mayo.

Queda claro que el nueve veces campeón del mundo está decidido a pasar por alto su edad y aunque para esta ocasión hará de relevo de Nick Cassidy (que priorizará la Fórmula E frente al calendario de los GT), piloto habitual al volante del Ferrari 488 GT3 Evo que pilotará Loeb en el trazado portugués como compañero de Felipe Fraga, la de Portimao no será su única aparición en un certamen que ya tanteó anteriormente hace casi una década.

Loeb comenzó a forjar su experiencia en estas carreras en 2013, cuando compitió en FIA GT al volante de un McLaren MP4-12C durante una experiencia en la que le acompañó Álvaro Parente. El francés logró el título tras imponerse en una de las carreras de campeonato y tres de clasificación. Además, también corrió en las 24 Horas de Le Mans y dos temporadas en el Mundial de Turismos. De ahí que en pleno afán por seguir siendo competitivo, retome a sus 48 años una disciplina donde, la ambición que demostró en el Rally de Montecarlo que conquistó frente a Ogier, será de nuevo la gran protagonista del reto.

"Aproveché la oportunidad"

Reconoce el francés que "a lo largo de mi carrera, siempre me ha gustado cambiar de disciplina" y explica más detalladamente su desembarco en el DTM: "Es un campeonato famoso y cuando se me presentó la oportunidad de competir en él, lo aproveché, por supuesto. Representa un desafío emocionante porque el estilo de conducción es completamente diferente". Sabe que pese a la experiencia "es momento de trabajar". "Me enfrentaré a especialistas en este tipo de carreras y mi objetivo será encontrar mi ritmo lo mejor que pueda y utilizar mi experiencia para dar al equipo buenos comentarios sobre la puesta a apunto del coche", confiesa.

Sabe que se trata de una experiencia “difícil” ya que su última carrera “de GT3 fue hace mucho tiempo”, pero le motiva el reto de una categoría donde, una vez más, saldrá a por todas: “Los coches son realmente divertidos de conducir. Coches muy rápidos y bonitos. Por lo tanto, estoy deseando que llegue”.