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MOTOGP

Las siete conclusiones del GP de la República Checa

El domingo hubo un podio inédito, por quienes lo integraban y por las motos que llevaban. Binder, Morbidelli y Zarco, con la KTM oficial y las Yamaha y Ducati satélites.

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Las siete conclusiones del GP de la República Checa
Mirco Lazzari gpGetty Images

1 MotoGP está raro.

Empezamos contando en AS el viernes, ya en la crónica del primer libre del fin de semana, que MotoGP estaba raro sin la presencia de Marc Márquez. Liderato al margen de Quartararo en esa sesión, ya estuvieron delante pilotos poco habituales de las primeras posiciones. Y el domingo la originalidad de la clasificación fue aún mayor, con un podio inédito, por quienes lo integraban y por las motos que llevaban. Binder, Morbidelli y Zarco, con la KTM oficial y las Yamaha y Ducati satélites. Entre los tres suman 93 carreras en MotoGP, el podio menos experto en toda la historia de la categoría. Lo dicho, que MotoGP anda raro estos días sin su campeón en la pista, lo que no significa que esté feo. Raro y feo no son sinónimos y la carrera de Brno fue muy entretenida.

2 No hay otro Márquez.

Tal y como está el panorama, con Honda anunciando que Bradl repetirá en Austria como sustituto de Marc, obligado a quedarse en casa para continuar con la recuperación de su segunda operación por la fractura en el húmero del brazo derecho, lo normal es que a final de temporada alguien le acabe destronando. Pero por lo visto en Brno, no está muy claro quién será el privilegiado. Quatararo hizo séptimo, Dovizioso undécimo y Maverick decimocuarto el segundo día en el que había que ejercer de Márquez en la parrilla, pero está visto que no hay otro igual.

3 Honda es un Titanic sin Marc.

A todo esto, la Márquez-dependencia de la que ya se hablaba en temporadas pasadas es tan real sin el campeón que Honda se ha convertido en un Titanic sin su referente, con un hundimiento impropio de su potencial y con el resto de sus pilotos convertidos en náufragos: Nakagami fue octavo a 12.8 de la cabeza, Crutchlow 13º a 18.7 (en su caso le salva que fue operado de una muñeca el 21 de julio), Álex Márquez 15º a 24.5 (al menos ha puntuado en las tres carreras) y Bradl 18º a 55.9. En lo que va de temporada, no han subido ni una sola vez al podio y el mejor resultado de un piloto del ala dorada es el cuarto de Nakgami en Jerez 2, favorecido por las averías de Bagnaia y Morbidelli más la caída de Miller. Una ruina dado su poderío.

4 La papeleta de Pol Espargaró.

El de KTM ha renunciado renovar con la fábrica austriaca para fichar por Honda con la intención de aspirar a ganar carreras, y ahora es KTM la que ha empezado a ganar y Honda la que no se acerca a ello desde hace tiempo con otro piloto que no sea Marc Márquez. ¿Daría marcha atrás si pudiera? Seguramente no, pero es para planteárselo. En Brno ganó su compañero Binder de manera brillante y el único que estaba en disposición de pelearle la victoria era él hasta que se fue al suelo en el toque con Zarco. Por cierto, que tres curvas antes se había colado ya Pol y en el lance con el galo también entró algo pasado a la curva 1. Eso hizo que tuviera que volver a cerrar la trazada ya con Johann dentro. Culpa del francés decidieron. Yo no lo tengo tan claro.

5 Rossi sigue disfrutando.

Qué bien le han venido a Rossi y a los numerosos rossistas estas dos últimas carreras, por los resultados, por las sensaciones y porque vuelve a divertirse. El principal obstáculo para que decidiera colgar el mono al acabar esta temporada y no renovar con Yamaha a sus 41 años era que estuviera hastiado, pero se le vuelve a ver feliz. Saliendo un pelo más adelantado en la parrilla habría llegado a luchar con Zarco por el podio y dio gusto verle celebrar con su amigo Morbidelli su tercer puesto. Era el primer podio para el italobrasileño y el primero para un piloto de la Academia VR46 en MotoGP. Tanto entrenamiento en el rancho de Tavullia da sus frutos, a todos.

6 Crisis española en Moto2.

Un único podio ha celebrado el motociclismo español en lo que va de temporada en Moto2. Fue el tercero de Martín en la lejana cita inaugural de Qatar y a partir de ahí lo más arriba que se ha visto a los nuestros ha sido con tres quintos puestos, dos de Canet, que para ser un novato lo está haciendo muy bien, y Fernández, que el año pasado firmó tres victorias y este año es fiel reflejo de la crisis española en Moto2. Al mallorquín se le esperaba en la pelea por el título desde el primer día, pero no. Lo buena noticia es que su quinto puesto de Brno parece haberle despertado del letargo. Lo mismo pasa con Navarro, al que le lastran las caídas de las dos primeras carreras. Y Martín está siendo más irregular que de costumbre. Nada que ver con la flota italiana, que ahora tiene a Bastianini en plan estelar, pero que también ha visto ganar a Marini y a Bezzecchi subir al podio.

7 Arenas está en plan campeón.

La categoría más abierta casi siempre suele ser la de Moto3, pero este año hay un piloto que está emergiendo en plan campeón. Se trata de Albert Arenas y, más allá de su liderato, con dos victorias y un segundo puesto, es por la forma que tiene de gestionar las difíciles carreras de grupo de esta categoría. Se le ve siempre en el sitio bueno, esa tercera o cuarta plaza en la que se controla lo que pasa delante o detrás. Se le ve con fuerza para tratar de romper el grupo cuando lo considera. Y se le ve con capacidad de reacción cuando las cosas no salen como él tenía previsto. Y a eso hay que sumarle que sabe sufrir, porque a Brno llegó con el tobillo aún hinchado tras su dura caída en Jerez 2, que le obligó a llevar a cabo mucha rehabilitación. Con lo que eso duele…