Schwantz: "Fue un gran logro que Maverick ganara en seco"
El gran símbolo de Suzuki se alegra de que la fábrica de sus amores regresara a la senda de la victoria nueve años después.
La victoria de Maverick Viñales en Silverstone el domingo pasado supuso el regreso a la senda de la victoria para una fábrica tan importante como Suzuki, ni más ni menos que nueve años después de la última vez (Francia 2007, con Vermeulen, en mojado), y hubo un personaje de leyenda en esto de las motos que se alegró de lo lindo en su Texas natal. Se trata de Kevin Schwantz, un símbolo de la fábrica de Hamamatsu, ganador de 500cc en 1993 a lomos de una RGV 500 perfectamente identificable con los colores de Lucky Strike y el dorsal 34, otro que está retirado de la parrilla de la clase reina, como el 58 de su amigo Marco Simoncelli desde ayer.
El ganador de 25 GGPP del medio litro, uno más que su eterno enemigo y hoy amigo Wayne Rainey (eso sí, el californiano con tres títulos), da mucho valor a la reciente victoria de Mack: "Maverick Viñales ganó en Silverstone en condiciones de seco con Suzuki, lo que ha sido un gran logro para la marca, demostrando que son capaces de ganar de nuevo. La moto se ha mostrado competitiva hasta ahora. Maverick ha tenido muy buenas actuaciones, salpicados con algunos errores como en Argentina. Todavía es un piloto joven, pero lo que ha sucedido en Silverstone es una combinación de madurez del piloto y fiabilidad de la moto después de dos años de buen desarrollo".
Para el Pajarito, fue clave el arranque de la carrera, condicionado por el aparatoso accidente sufrido por Pol Espargaró y Loris Baz. “Maverick hizo una buena salida pero luego apareció la bandera roja. Seguro que pensó: '¡Oh no! Otra vez a empezar'. Pero realizó de nuevo una gran salida, igual de buena que la primera, y se mantuvo constante", dice.
Como no podía ser de otro modo, Kevin disfruta con la igualdad que predomina esta temporada en MotoGP, en un curso en el que ya ha habido siete ganadores diferentes: "Es muy bueno tener variedad de vencedores en MotoGP y, además, que para estos sea su primera victoria en la clase reina, como Crutchlow, Miller y ahora Maverick. La reducción de la distancia entre los pilotos de la parrilla está haciendo mucho más interesante las carreras, donde no sólo están destacando las ocho motos de fábrica, sino que también las otras están empezando a hacerse un hueco, como hemos visto".
Y termina en su análisis para AS con una felicitación sincera: "Enhorabuena a Suzuki, enhorabuena a Maverick. Será interesante comprobar si en la carrera en Misano Suzuki es capaz de mantener el nivel y si Yamaha puede salir de los apuros que parece tener". Ganas no le van a faltar, ni a Maverick ni a Suzuki.