Al principio Carlos Sainz salió serio del coche, pero en cuanto se dio realmente cuenta de lo que había hecho se subió, con los brazos en alto, a su Volkswagen Race Touareg y celebró su primer triunfo en el Dakar en un día histórico para el deporte español, el del primer título dakariano de siempre en coches.
A Sainz le bastaba con conservar la ventaja de 2:48 que tenía con Al Attiyah y lo ha hecho, ya que sólo ha perdido 36 segundos con el piloto qatarí, su gran rival en la escudería alemana y finalmente ha ganado el raid con 2:12 sobre el príncipe árabe.
De esta manera Sainz se suma a los triunfos en motos de Nani Roma en 2004 y de Marc Coma en 2006 y 2009. El piloto madrileño aumenta su leyenda y después de ser el primer y único español en ganar el Mundial de Rallys ha logrado hacer lo mismo en la prueba más dura del mundo. Este año ha ganado dos etapas e imponiendo un ritmo constante ha conseguido ganar.