El australiano Mick Doohan, pentacampeón del Mundo en 500 cc. en los años noventa, ha señalado que la decisión de su hasta este año protegido Valentino Rossi de dejar Honda para fichar por la eterna rival, Yamaha está motivada principalmente por una cuestión económica.

"Bien por Valentino si eso es lo que él quería hacer. Ha tenido una gran carrera con Honda, pero al final el negocio es el negocio. Probablemente el factor económico ha pesado tanto como otros factores en su decisión de marcharse a otro equipo", ha señalado Doohan en declaraciones al sitio web 'www.motograndprix.com'.

"En cualquier caso no estoy muy sorprendido por el cambio de Valentino. Como he dicho, el negocio es el negocio y Yahama ha decidido tener un piloto ganador", ha añadido al respecto.

Doohan no cree que el piloto italiano vaya a tener que cambiar sus objetivos, ganar el mayor número de carreras y el Mundial, por el hecho de este cambio.

"La decisión de cualquier piloto en el mismo caso que Valentino hubiera sido mantenerse en lo alto y asegurarse de que el ambiente es el adecuado. Él está seguro de su habilidad para tenerlo todo bajo control y seguir ganando. Yamaha no ha tenido a un piloto fuerte desde Wayne Rainey y no ha ganado ningún campeonato desde 1992", ha comentado, añadiendo que "lo sabe, como lo sabía yo cuando se habló varias veces durante mi carrera de que me iba".

"Yamaha está cansada de perder"

Para el pentacampeón del Mundo el golpe de efecto realizado por Yamaha es una clara muestra de que "está cansada de perder" con Honda y "han decidido hacer algo e ir en serio a ganar".

"Por supuesto, creen que Valentino es el piloto adecuado para conseguir los resultados que quieren. Honda seguirá fuerte, con muchas posibilidades. Nicky Hayden es probablemente la mayor inversión a largo plazo, aunque aún debe evolucionar", ha indicado.

Para Doohan, las opciones de Honda, que prepara ya una armada de pilotos con Gibernau, Max Biaggi o Hayden a la cabeza, pasarán por "mantener la misma regularidad que Vacado de Valores (CNMV).

La remuneración al accionista, a la que habrá que efectuar la correspondiente retención fiscal, se pagará a todos los títulos de la compañía, tanto a las de clase 'A' como las de clase 'B', y las recientemente emitidas en la última ampliación de capital.