Impresiones de Borderlands 4, ¿la evolución que necesita la saga?

Unas declaraciones de Randy Pitchford, CEO de Gearbox, alimentaron los rumores sobre una posible subida de precio de Borderlands 4. El directivo dejó caer que los fans de la saga pagarían 90 euros por el videojuego, lo que algunos interpretaron como una certeza de futuro. Sin embargo, el título saldrá a precio normal (desde 79,99 euros). MeriStation ya ha podido probarlo durante unas horas y hemos llegado a algunas conclusiones preliminares, ¿te vienes con nosotros a Kairos?

Podemos decir que Borderlands 4 es fiel al tono y al estilo jugable de la saga. Sigue profundizando en su diseño looter shooter, solo que esta vez las dimensiones son todavía más extensas. A primera vista, la primera novedad es la localización en el que se desarrolla. A diferencia de otros títulos de la saga, la cuarta entrega no transcurre en Pandora, sino en un nuevo planeta. Kairos es un sistema gobernado por un dictador, lo que da una idea del tipo de mundo en el los protagonistas se van a mover. Jugablemente, se traslada a un mundo algo más abierto, donde las cuatro regiones se conectan sin tiempos de carga. Tiene ciclos de día y noche, climatología, etc. Es posible desplazarse utilizando un vehículos y orientarse gracias al robot Echo-4, que traza la ruta hacia nuestro destino.

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Dictadura, distopía y humor con sabor Borderlands

Se dice que durante miles de años, el tirano TimeKeeper ocultó la existencia del planeta y controló a sus habitantes mediante unos implantes cibernéticos conocidos como Bolts. El dictador fundó La Orden, un grupo de soldados sintéticos que se encarga de mantener el orden, valga la redundancia.

Parte del ADN de Borderlands es su humor, a veces algo chabacano, un tono que no se ha perdido y que continúa vigente en la nueva producción. Quizá ya no sorprenda tanto como antes, pero los diálogos, los nombres de los personajes, etc. están impregnados de esa vis cómica. Sigue siendo un juego divertido e irreverente, con un diseño que en algunos puntos presenta ciertos arcaísmos. Por ejemplo, cuando un personaje habla y no puedes hacer nada hasta que su perorata concluya.

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En la primera fase de la preview exploramos los Campos Esfumados, una de las cuatro zonas que componen Kairos. Nos dan a elegir entre dos personajes, dos de los Cazadores de la Bóveda de los cuatro que estarán disponibles: Rafa o Vex en este caso. Como cabría esperar, cada uno responde a un arquetipo diferente, por lo que sus habilidades difieren. Rafa destaca por sus poderes de invisibilidad, mientras que Vex puede invocara un poderoso aliado. Como suele ocurrir en esta clase de eventos, el tiempo limitado nos obliga a centrarnos, sobre todo, el la historia principal.

Para ser un juego exclusivo de la nueva generación (usa Unreal Engine 5), Borderlands 4 no supone un salto enorme a nivel gráfico, pero sí se perfilan algunas mejoras visuales, siempre respetando la líneas artísticas de la saga. Gearbox opta de nuevo por el Cell Shading y los personajes con acabado cartoon.

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Disparar y recoger loot, el concepto no cambia

El componente narrativo empapa las misiones principales y secundarias, aunque sirve más bien como gatillo para disparar la acción shooter, el bucle de disparos y recogida de loot que se repite como en cualquier looter-shooter que se precie. De todos modos, el diseño de las misiones sigue siendo un tanto convencional y suele terminar con oleadas de enemigos a los que exterminar. Nos hemos encontrado, eso sí, bastantes arquetipos, de modo que el juego invita a experimentar con las habilidades de los protagonistas.

Lo mejor de Borderlands 4 sigue siendo su gunplay, frenético, intenso y con muchas opciones. En esta entrega, hay ocho fabricantes de armas. Las piezas con licencia se pueden combinar para conseguir habilidades de varios fabricantes en una sola arma. Por otro lado, el sistema incorpora ranuras de mejora para cada arma. La Artillería es una ranura compartida destinada a granadas y armas pesadas: una vez utilizada, necesita un tiempo para recargarse.

En cuanto al sistema de progresión, los puntos se pueden utilizar para desbloquear nuevos poderes en el árbol de habilidades correspondiente. Estos talentos se asignan a distintos botones y requieren un tiempo de recarga.

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Misión de Bóveda: matar a todo lo que se mueva

La segunda parte del evento está todavía más centrado en la acción. La misión de la Bóveda nos desafía a eliminar oleadas de enemigos, cada cual más difícil que la anterior. Al final, aparecen incluso monstruos que cuentan con barreras de protección, por lo que su dureza se hace cada vez más patente. Al final del camino nos espera un enorme jefe final: toda esta parte la jugamos en cooperativo, lo que facilita el desenlace. El monstruo se agarra al techo y lanza sus ataques letales. Mientras tanto, disparamos a diestro y siniestro, pendientes de los pequeños enemigos que nos atacan de vez en cuando. Resulta crucial estudiar el entorno y buscar puntos débiles que ayuden a bajarle la barra de vida.

El juego se ha diseñado desde cero con el modo cooperativo en mente e implementa un nuevo sistema para conformar grupos en línea, que permite cambiar de modo de juego sin tener que volver a construir el equipo.

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Borderlands 4 saldrá a la venta el próximo 12 de septiembre en PS5, Xbox Series X, Xbox Series S, Nintendo Switch 2 y PC. Nos lo decían sus desarrolladores: es el juego más ambicioso de la saga, pero ¿lo suficiente como para marcar su propio camino? La sensación es que es un producto tan bueno como los anteriores, con algunas mejoras que marcan la diferencia, aunque bastante conservador en su planteamiento. De todos modos, solo hemos visto una fracción de lo que Gearbox está preparando.

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