Oblivion cabreó a muchos jugadores con un detalle hace casi 20 años y ha vuelto a hacer lo mismo con el remaster

Corría 2002, eran tiempos más inocentes, todavía sentíamos que podíamos comprar un juego con la experiencia completa contenida, más allá de expansiones de gran calado. The Elder Scrolls: Morrowind, sin ir más lejos, era el ejemplo típico: un magnífico juego principal y dos grandes expansiones de pago (Tribunal y Bloodmoon) que expandían la aventura de forma significativa para aquellos que se hubieran quedado con ganas más. Y si entrabas en la página web del juego, podías descargar pequeños complementos gratis, cortesía de la casa: paquetes de sonidos adicionales en la Costa Amarga, Yelmo de Tohan o misiones adicionales como el Asedio en Polilla de Fuego. La vida nos sonreía.

Pero llegó 2006 y algo cambió. El nuevo y esperadísimo Elder Scrolls llegaba simultáneamente a PC y a la flamante Xbox 360, llevando a sus lomos la excitación por una nueva de generación de máquinas. La consola de Microsoft, que se había presentado al mundo con Allard junto a Frodo enseñándonos cómo Velocity Girl iba a sacar dinero vendiendo diseños de camisetas en el bazar digital, también ofrecía la misma gracia a los pobres estudios necesitados de dinero. ¿Que es eso de dar misiones, armaduras y paquetes de sonidos gratis? Un nuevo universo de posibilidades se desplegaba, y Bethesda iba a entrar a lo grande en él.

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Así nació el que, para muchos, fue su primera “microtransacción” conocida. El concepto de expansión de pago era bien conocido, pero lo de la “microtransacción” era algo novedoso. ¿Quieres proteger a tu querido caballo con una armadura? ¿quieres que tu caballo “mole” de verdad"? Por unos insignificantes 2.50€ podías obtener el privilegio de comprar una armadura por 500 monedas de oro en el juego.

Fue un gran escándalo en su momento, publicaciones y foros de toda índole se movían entre la hilaridad, el cinismo y el enfado. Hubo bromas de toda clase, de peor y mejor gusto. Pero la que más se rio fue la propia Bethesda. EL DLC fue un éxito comercial y marcaba así el lucrativo comienzo de una nueva vía para las compañías, que vieron las puertas abiertas para intentar colar toda clase de complementos de pago.

Todo vuelve, incluso la armadura para caballo

Con la llegada de Remastered, Bethesda no se ha resistido a tirar de algo de retranca con el tema. El juego base de Oblivion Remastered tiene una cantidad muy generosa de contenido, al incluir el juego base junto a las expansiones Caballero de los Nueve y el (magnífico) Shivering Isles. Pero si te gastas un “poco” más (9,99€ para ser exactos) y compras la versión “Deluxe”, puedes acceder a nuevas misiones, armaduras y sí, nuevos sets de armaduras de caballo.

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El cachondeo en foros por supuesto que está garantizado, en reddit estaban riéndose de que todavía Bethesda les pide pagar pagar por las armaduras de caballo. En realidad no es el mismo escenario, y lo del caballo con armadura de pago ha quedado como algo inocente con el tiempo, comparado con las cosas por las que nos han pedido pagar con el paso de los años. Pero como anécdota, y por recordar viejos tiempos, bien vale.

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