Bajó al sótano de sus abuelos y encontró un tesoro de cartas Pokémon valorado en unos 4000 euros

Visitar a nuestros abuelos a menudo es recomendable no solo por disfrutar de su compañía y su sabiduría vital, sino también porque en los sótanos, desvanes o trasteros de sus casas, podríamos encontrar todo tipo de tesoros o regalos de cumpleaños atrasados que, por distintos motivos, nunca llegaron hacia sus destinatarios. La historia que tenemos hoy entre manos es una de este tipo, con un usuario de Reddit mostrando, orgulloso, el pequeño gran botín que halló en el sótano de la casa de sus abuelos. Se trata de nada más y nada menos que dos blísters de que contienen sobres de cartas de Pokémon de los sets Fossil y Legendary Collection que datan de principios de siglo, lo que los convierte en objetos muy demandados entre los coleccionistas más pudientes. Aunque el hallazgo tiene un gran valor sentimental para este internauta, también tiene un potencial valor económico nada desdeñable: puede sacar alrededor de 4.000€ en el mercado paralelo de compraventa de estos ítems.

Un usuario de Reddit encuentra sobres de cartas Pokémon nuevos e impolutos en el sótano de sus abuelos: pueden llegar a valer 4.000 euros

El pasado lunes 21 de abril, el usuario llamado eternalxeyeroll compartía en el subreddit oficial del Juego de Cartas Coleccionables Pokémon un hallazgo muy interesante que se produjo en el sótano de la casa de sus abuelos. Este internauta mostraba, emocionado, dos blísters de tres sobres cada uno que incluían dos sobres de la colección Fossil, y uno del set Legendary Collection. Debido a la rareza de los productos en la actualidad y al estado de conservación impoluto de los mismos, la publicación se hizo viral, y amasa más de 10.000 me gusta y 400 comentarios.

Aunque el hallazgo tiene un gran valor sentimental para él, otros usuarios no tardaron en explicarle el valor monetario de los objetos: tal y como sugiere una venta con éxito de febrero de 2025 en eBay de una unidad del mismo producto, cada uno de los blísters puede alcanzar los 2.250 dólares norteamericanos —unos 1.970€—, por lo que podría sacar alrededor de 4.000 euros en total si decide venderlos. Aunque el “precio final” del producto lo determina lo mucho que esté dispuesto a pagar una persona por él, la venta cerrada exitosamente hace apenas unos meses es un indicador fiable que puede servir para tasar de manera realista los packs.

En la caja de comentarios de la publicación también hay otras reflexiones y sugerencias interesantes, incluyendo quienes argumentaban que podría ser posible sacar más dinero vendiendo los sobres de manera individual o contactando con un influencer especializado en Pokémon para vendérselos directamente para que tuviese contenido en forma de vídeos de apertura de sobres clásicos. No obstante, otros usuarios con experiencia en la materia se dieron cuenta de un detalle clave: los sobres no son una primera edición, lo que no solo los devalúa con respecto a los que sí lo son, sino que esta característica hace que lo más inteligente en lo que a conservación del valor se refiere siga siendo mantener los blísters cerrados.

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La colección Fossil fue lanzada originalmente en Estados Unidos en octubre de 1999, y estaba centrada en los Pokémon de la Primera Generación, con un énfasis especial en Omanyte, Omastar, Kabuto, Kabutops y Aerodactyl, los Pokémon que estaban extintos pero pudieron ser revividos gracias a muestras de ADN disponibles en ámbar y en sus fósiles. La colección Legendary Collection, por su parte, fue lanzada en mayo de 2002, e incluía Pokémon clave como los Pájaros Legendarios de Kanto (Articuno, Zapdos y Moltres), Mewtwo, así como versiones “Oscuras” de Venusaur, Blastoise y Charizard. En resumen: ambos sets tienen un gran valor a día de hoy no solo por la rareza y antigüedad, sino también por el factor nostalgia, al estar centrados en los Pokémon que aparecían en los primeros videojuegos y con ilustraciones de Ken Sugimori.

Aunque el creador de la publicación no ha revelado qué decisión tomará con respecto a estos diamantes en bruto, una cosa está clara: un botín de esta magnitud no se ve todos los días. Tampoco ha entrado en detalles con respecto a cómo halló estos objetos, o el motivo por el que han permanecido abandonados, pero en buen estado, durante prácticamente un cuarto de siglo. Puede que fuese un descuido de sus abuelos en forma de un regalo de cumpleaños que, aunque fue adquirido, nunca llegó a su destino. En definitiva: casos como este nos recuerdan que nunca está de más tener nuestros trasteros y los de nuestros allegados lo más ordenados posible no solo por limpieza e higiene, sino también porque, entre tantos trastos antiguos, es posible que nos topemos con algún objeto de gran valor que nos pueda sacar de un apuro económico.