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Star Wars Episode 1: Racer

  • PlataformaPC7.5
  • GéneroConducción
  • DesarrolladorLucasArts
  • Lanzamiento01/11/1999
  • TextoEspañol
  • VocesEspañol

Siéntete un Ben-Hur del futuro

Este juego te hace colocarte detrás de los motores de más de 21 podracers diferentes. Elegirás entre 25 carreras únicas en ocho mundos distintos, cada una de ellas con sus propios obstáculos naturales y no tan naturales que tendrás que superar.

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Si hace unos días comentábamos La Amenaza Fantasma, ahora es el turno del otro juego de Lucasarts basado en el Episodio I de La Guerra de las Galaxias. En este caso, el juego gira en torno a las carreras de Podracers, unos curiosos vehículos que recuerdan mucho a cuádrigas romanas, pero utilizando turbinas y repulsores en vez de caballos. La verdad es que resulta curioso que Lucasarts haya sacado un juego basándose en una secuencia de 15 minutos de la película, pero viendo el desarrollo de dicha secuencia en la pantalla del cine, parecía idónea para trasladarla al ordenador.
El caso es que tras los 188 MB de instalación y ver la presentación con el alto nivel a que nos tienen acostumbrados últimamente los juegos, veamos qué tal es eso de manejar vehículos tan originales.

Un Podracer se compone de una cabina a la que van unidos dos o más motores mediante unos cables. Gracias a la potencia de estos motores, los vehículos pueden alcanzar velocidades de vértigo a unos cuatro metros de altura sobre el suelo. Las carreras de estos artefactos son famosas en todo el Universo de Star Wars y hay montones de dinero en juego cada vez que corremos en alguno de los veinte circuitos de que consta el juego, distribuidos en varios campeonatos. Cada circuito está situado en un planeta diferente y está precedido de una secuencia animada que nos presenta el planeta y el tipo de terreno. Al finalizar la carrera y dependiendo de nuestra posición al cruzar la meta, recibiremos una cantidad de créditos que podremos utilizar para mejorar nuestro vehículo (velocidad, aceleración, refrigeración, giro, freno,...) o para comprar unos pequeños androides que repararán nuestra máquina mientras corremos (al estilo de Carmaggedon y su secuela). Aunque al principio manejemos el Podracer de Anakin Skywalker, podemos luego cambiarlo por aquél cuyas características más se adecuen a nuestra forma de conducir.

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Durante la carrera, tenemos la posibilidad de elegir de entre cuatro cámaras diferentes y la competición se desarrolla de la manera clásica: debemos dar un cierto número de vueltas al circuito en el menor tiempo posible con vidas infinitas. Cuando choquemos lateralmente con algún obstáculo, la estructura se dañará y habrá que repararla, pero nuestro vehículo quedará totalmente destruido si el choque es frontal. También podemos activar el Boost, una dosis extra de velocidad, ejecutando una maniobra que viene descrita en el manual, pero abusar del Boost puede hacer que los motores se sobrecalienten y se incendien.

Resumiendo, SW Episode I Racer es un juego en el más puro estilo de Need for Speed, pero manejando Podracers en vez de Porsche y Ferrari y con la posibilidad de reparar nuestro cacharro cuando se averíe.
 

Audio/Vídeo:
Del mismo modo que ocurría en The Phantom Menace, todo el audio ha sido sacado de la próxima película de Star Wars: los diálogos, los sonidos de los vehículos, la música de John Williams, etc, etc. Así, cuando vayamos a comprarle mejoras a Watto, oiremos su peculiar forma de hablar. Además, el actor de doblaje que hace de Anakin Skywalker (Masumi Mutsuda) ha prestado su voz para el juego, con lo que los gritos del chaval han sido pasados a bits y podremos oírlos durante las carreras. La música está muy bien adaptada al trepidante desarrollo del juego, pero si nos cansamos en algún momento, podemos hacer que sólo suene en la última vuelta, pero sería una lástima no escucharla al menos un rato, porque la música de orquesta no es habitual en un juego de carreras.

En cuanto al aspecto gráfico, el diseño de los vehículos es impresionante tanto en número de polígonos como en texturas, siendo todos los Podracers tan diferentes entre sí como lo son sus pilotos. Además, los decorados de los planetas son tremendamente vistosos con multitud de detalles que harán que te estrelles: maquinaria trabajando en los planetas mineros, vehículos submarinos en los mundos marinos, impresionantes glaciares en mundos helados,... Los circuitos en sí ofrecen varios caminos, algunos más largos que otros, y gracias a que no conducimos un coche, son mucho más variados que en cualquier otro juego: túneles submarinos, pistas con gravedad cero, las arenas de Tatooine, y un sinfín de circuitos que harán vuestras delicias.

Por otro lado, las secuencias animadas son espectaculares, aunque en algunos momentos, la música se oiga en mono.
  

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Estrategia y trucos:
Como en cualquier juego de carreras, lo mejor es aprenderse los circuitos de memoria y sobre todo los atajos. Guarda los Boost para las rectas o para apurar en la línea de llegada.

Como el freno apenas se usa, lo mejor es comprar más aceleración y velocidad máxima, por este orden. Los robots de reparaciones también son necesarios.

No gastes el dinero a lo tonto: ahorra hasta que puedas comprar lo que realmente te interesa.

Estos trucos o consejos son los que había disponibles el 16/07/99. Si no encuentras lo que buscas, pasa por la sección de TRUCOS.
 

Jugabilidad:
Racer tiene muchos circuitos, los vehículos son originales (y con un modelo físico impresionante) y el aspecto técnico es muy bueno, pero algo falla. A lo que nos referimos es que Racer es demasiado parecido a cualquier juego de carreras (pese a lo diferente de los vehículos implicados): dar vueltas a un circuito, conseguir un buen puesto, mejorar el vehículo. Si habéis jugado a Need for Speed High Stakes, son idénticos en cuanto a desarrollo y todos los aficionados al volante tenemos la misma pregunta: ¿No queda nada por inventar en los juegos de carreras? Esperemos que Midtown Madness aporte algo, pero parece ser que exige un ordenador de última generación para jugar con soltura (en un Pentium II 350+Riva TNT no se puede poner a tope de detalle).

Además de ser el mismo juego de siempre con diferentes gráficos, no termina de engancharte, porque si el primer campeonato de 7 circuitos es tremendamente fácil (en la primera partida quedé el primero en todos), el segundo campeonato es desesperante, porque sorprendentemente, los otros pilotos se vuelven tremendamente listos.

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Comparándolo con...:
Need for Speed 3: Racer es más rápido y tiene más cosas como comprar mejoras o reparar el vehículo. Pero NFS3, tiene el modo de persecución, que es toda una gozada y podemos cambiar las condiciones climatológicas del circuito. Aún así, Racer tiene más circuitos. Como ya he dicho antes, NFS High Stakes es idéntico a Racer (podemos comprar coches y mejoras), pero sigue teniendo a su favor el modo de persecución.

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Test Drive: la última entrega ha salido inferior técnicamente a NFS, pero yo recuerdo aquel Test Drive 3 que trataba de conducir por Estados Unidos sin tener que dar vueltas a un circuito, mientras esquivabas a la policía y elegías la carretera que quisieras en cada cruce que superaba en originalidad a cualquier juego de coches que haya visto (hasta ahora). ¿No se puede hacer un remake como el de Dune 2-Dune 2000?

 



La variedad de circuitos, tanto en gráficos como en número. Lo mismo cabe decir de los vehículos.

El comportamiento de los vehículos es muy realista, sobre todo la flexibilidad que ofrecen en las curvas los motores unidos a la cabina por unos cables.

La música, el sonido y la ambientación del Episodio I.

El modo multijugador es un vicio, como en todos los juegos de este tipo.
 


Enlaces o Links:
www.lucasarts.com
www.starwars.com

Los aficionados a los juegos de Star Wars ya os tenéis que saber estos enlaces de memoria.

 
Equipo necesario:
P166 (recomendado 200), 32 MB RAM (mejor con 64), tarjeta compatible con Direct3D de 4 MB, CD-ROM 4X, 188 MB de Disco Duro (+ 150 para el swapping de Windows) y tarjeta compatible de 16 bits. Necesitarás DX 6.1, incluido en el CD del juego. 

Equipos de pruebas:
Pentium II 233, 128 Mb RAM, Riva TNT, Win 98. El juego iba como la seda en 640x480, 800x600 y 1024x768.

7.5

Bueno

Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.