Gaming Club
Regístrate
españaESPAÑAméxicoMÉXICOusaUSA
Plane Crazy

Plane Crazy

  • PlataformaPC8
  • GéneroSimulación
  • DesarrolladorEuropress
  • Lanzamiento01/09/1998
  • TextoEspañol
  • VocesEspañol

Con alas y a lo loco.

Coged el juego de carreras de coches más rápido que encontréis, cambiad el coche por un avión monomotor de acrobacias, multiplicad la velocidad por tres y cambiad las carreteras por cañones, desfiladeros, calles estrechas de una ciudad y cosas por el estilo. El resultado sería Plane Crazy

Actualizado a

Coged el juego de carreras de coches más rápido que encontréis, cambiad el coche por un avión monomotor de acrobacias, multiplicad la velocidad por tres y cambiad las carreteras por cañones, desfiladeros, calles estrechas de una ciudad y cosas por el estilo. El resultado será algo similar a Plane Crazy, que además lleva como subtítulo "Aviación Incivil".


Como es habitual últimamente, la instalación se limita a meter el CD del juego y a seguir las instrucciones en pantalla. Una vez terminada, aparecerá ante nosotros la pequeña secuencia de introducción y luego el menú principal del juego, con una música marchosilla. Ansiosamente, pulsamos el botón de "Empezar carrera". La adrenalina empieza a correr por nuestro torrente sanguíneo y elegimos la opción de "Carrera rápida". Ante nosotros aparece otro menú para elegir un recorrido de entre los cinco que se nos presentan: Border Dash (un gran cañón), Dockland Dive (los muelles), Monument Rush (un cañón con un río y muchas agujas rocosas), Volcano Rapids (el interior de una cueva por la que discurre un río de lava), Sin City Run (vuela por los cañones de cemento de una gran ciudad por la noche). Ya que los nombres no nos dicen mucho sobre la dificultad, cogemos el manual de instrucciones (a veces hay que hacerlo) y vemos que los escenarios están ordenados por grado de dificultad creciente. Ya que es nuestra primera partida, cogemos el de arriba del todo. Tras unos instantes de carga, aparece un travelling de un impresionante escenario dibujado en 3D con filtrados bilineales (siempre que tengamos una tarjeta 3D de 4Mb) y una cantidad de polígonos alucinante, mientras unos rótulos nos indican el tiempo disponible y la modalidad de carrera. Apretamos el disparo y aparece un enjambre de aviones enfocados desde atrás y una cuenta atrás que también podemos oír en perfecto castellano. La cuenta atrás acaba y el subidón nos embota la mente. Despertamos a la consciencia cuando acaban los casi tres minutos de tiempo de que disponíamos. El joystick todavía tiembla...
Creeréis que estoy exagerando pero es que es alucinante volar a 500 Km/h por un cañón por el que cabe nuestro avioncito y poco más. O por una cueva en la que el rugido del motor resuena por las paredes. O sobrevolar un río de lava perfectamente animado, con el paisaje teñido de rojo. O acercarnos al agua y ver como producimos pequeñas olas. Vamos, que los escenarios son una gozada y es una pena que sólo haya cinco.
El juego se desarrolla como un típico juego de carreras de coches, es decir, con un tiempo límite inicial que se irá ampliando a medida que vayamos pasando por los puntos de control a una sóla vuelta. Mientras nos quede tiempo, dispondremos de vidas ilimitadas para intentar llegar hasta el final.
A lo largo de nuestro recorrido, no tenemos por qué seguir la ruta marcada porque podemos seguir atajos ya existentes o crearnos los nuestros propios disparando a lugares del paisaje indicados por un punto de mira. Además, podemos disparar a nuestros adversarios si nos ponemos justo a su cola para que se estrellen y nos dejen un poco de ventaja. La novedad más importante es que hay ciertos sitios del paisaje que se pueden destruir produciendo derrumbamientos de rocas que pueden fastidiar a todo el que vaya detrás de nosotros. El problema es que al disparar, el avión sufre un fuerte retroceso que puede hacer que el desprendimiento nos pille a nosotros también. Podremos recoger poderes especiales como invulnerabilidad o nitros que harán que nuestro avión sufra una fuerte aceleración durante breves segundos. También hay otras sorpresas como corrientes bruscas de aire (nos avisarán de ello) o aire caliente que nos hará subir si pasamos cerca de una fuente de calor (el segundo escenario está lleno de chimeneas llameantes) o ventiladores gigantes. Disponemos también de la posibilidad de elegir entre cuatro vistas diferentes para no perdernos detalle.

Plane Crazy


Otra modalidad de carrera es la carrera fantasma, en la que corremos contra el reloj. La primera vez que corremos, nuestro récord será grabado y el próximo que juegue puede intentar mejorarlo. Esto tiene una cosa muy buena y es que a nuestro lado aparecerá un avión fantasma que recorrerá el camino tal y como lo hizo cuando consiguió esa marca que queremos mejorar. (Como sucedía en el Sega Rally, el Formula 1 Racing Simulation, el Red Line Racer y otros)
La última modalidad de juego es el campeonato, en el que iremos recorriendo los cinco circuitos sucesivamente mientras intentamos entrar en el podio para conseguir algo de dinero y mejorar nuestro avión. Sí, nuestro avión puede recibir retoques para mejorar el motor, las alas y todo lo que queráis para mejorar sus prestaciones y su resistencia a los golpes.
Volviendo al menú principal, metámonos en la opción de configurar el avión. Aparte de cambiar el nombre del piloto y del avión, podremos elegir de entre tres chasis diferentes y 10 tipos de textura para alas, motor, fuselaje y cola. Con todas estas combinaciones, supongo que todo el mundo podrá elegir el patrón de colores que más se adecue a su personalidad (mi avión es rojo fuego). Podremos grabar el modelo y luego recuperarlo para nuestras carreras.
La verdad es que el juego es bastante difícil al principio, dado la cantidad de controles que tiene: acelerador, freno, disparo, freno de emergencia y elegir poder. Con el teclado, la cosa es muy difícil, ya que lo más posible es que os tiréis todo el recorrido rebotando de pared a pared. Así que el joystick es prácticamente obligatorio y mejor si tiene control de velocidad y cuatro botones. Pero una vez cogido el truquillo, nos aguardan horas de diversión.
Esta diversión se puede multiplicar porque el juego soporta 8 jugadores en red o a través de Internet. Puede ser la pera el ir empujando a tus amigos hacia el río de lava o contra un árbol caído. Je, je (risa maquiavélica).

Plane Crazy

Audio/Vídeo:
La música está formada por una pista de audio para cada escenario (que se adapta perfectamente a cada ambiente) y otra para los menús. Todas son de gran calidad y así podremos oír un solo de armónica al principio del escenario de los muelles o tambores y coros de estilo africano en el volcán. Los efectos de sonido son muy buenos, haciendo un uso muy inteligente del estéreo cuando nos adelanta un avión o pasamos demasiado cerca de una pared. Cuando vemos barcos o trenes, también los podremos oír con mayor intensidad cuanto más cerca los sobrevolemos. Por último, las voces del locutor dándonos consejos (o riéndose de nosotros) están perfectamente dobladas al castellano.
Los gráficos dependen directamente del equipo que tengamos. Con aceleración por software (sin tarjeta compatible Direct 3D) son cutres y en un Pentium II los podremos ver a 512x384 en 16 bits sin problemas, pero la calidad deja mucho que desear. Para disfrutar de ellos en todo su esplendor, se requiere una aceleradora 3D de 4 Mb. Las imágenes que podéis ver están sacadas con la configuración que aparece al final del artículo. El juego viene preparado para aprovechar tarjetas con chips de última generación como los Nvidia Riva 128, ATI Rage Pro, Power VR 2 o Voodoo (no podía faltar). Con mi ATI Rage II+, a 640x480 el juego sufría algún corte pero iba decentemente bien.
Mención especial merece la estela de condensación que se forma en las alas de nuestro avión, de una calidad que no había visto antes. Es genial ver como se gira y se retuerce cuando nuestro avión cae en barrena o vibra por las corrientes de aire.


Estrategia y trucos:
Permanece atento a los avisos del locutor. Si oyes "Ahí viene" es que te acaban de disparar. Haz un quiebro brusco y te evitarás problemas. Los disparos no te matan pero te dejan sin control unos instantes preciosos. El locutor también te avisará de las corrientes de aire o de los puntos en los que puedes disparar.
Cuando dispares al paisaje para obstaculizar a tus adversarios, aguarda hasta el último momento, para que el retroceso no haga que no te dé tiempo a pasar. Cuando veas un obstáculo en tu camino (una valla al final de un túnel o una aguja de roca) al que puedas disparar, hazlo con suficiente antelación, para que los trozos no te den.
Vuela bajo, podrás ir más deprisa.
Sobre todo, practica mucho en la modalidad fantasma para saber a qué obstáculos merece la pena disparar y a cuáles no. Lee el manual para ver qué poderes conviene escoger. Aunque se escojan como en las máquinas tragaperras, se puede calcular a ojo cuál te va a tocar.
En vez de reducir la velocidad, es mejor usar el freno de emergencia porque se pierde menos tiempo.
En el escenario del río de lava, hay un momento en que tienes que atravesar la catarata. El sitio justo es en la base.


Jugabilidad:
Pues mucha. ¿Tengo que decir algo más? Al principio cuesta un poco cogerle el truco, pero luego no hay quien lo suelte. Mi hermana no me deja jugar a mi desde que se lo he enseñado.


Comparándolo con...:
Pues el único juego al que me recuerda algo es al Slipstream 5000, que ya tiene unos añitos, en el que corríamos con naves en vez de con aviones. Dejando aparte las diferencias técnicas de 3 años para acá, Plane Crazy es más divertido. Lo de disparar al paisaje es totalmente nuevo para mí y las turbulencias de aire también son originales.

Plane Crazy



Los gráficos y la velocidad a la que se desarrolla el juego. La demoledora música. La traducción perfecta al castellano de todo el juego. La diversión que produce.

8

Muy Bueno

Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.