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Fortune Summoners

Fortune Summoners

  • PlataformaPC7.5
  • GéneroRPG, Acción
  • DesarrolladorLizsoft
  • TextoInglés
  • VocesInglés
  • EditorCarpe Fulgur

No te fíes de las apariencias

El tercer proyecto distribuido por Carpe Fulgur nos lleva a una tierra de magia, dragones, mazmorras y encantadoras niñas viviendo aventuras. Fortune Summoners recoge el legado de títulos como Wonder Boy y nos presenta un juego de acción con toques de rol, muchas posibilidades y lo suficientemente difícil como para poner a prueba al jugador más duro.

Actualizado a

Carpe Fulgur nació con una idea única y, seguramente, un tanto descabellada. La pequeña compañía iba a dedicarse exclusivamente a traducir juegos independientes japoneses y venderlos a través de los servicios de descarga digitales actuales, como Steam o GamersGate. La escena independiente japonesa lleva décadas ofreciendo títulos de toda clase, realizados por diminutos grupos e incluso en solitario, y hay auténticas joyas cuyo acceso fuera de japón -e incluso dentro dependiendo del juego- está más que limitado por motivos técnicos y el idioma. Estos juegos se producen en la escena doujin, que es la palabra japonesa que recoge la gran amalgama de grupos que se dedican a producir obras a nivel amateur o semi-profesional en cualquier disciplina, ya sea manga, literatura o videojuegos, con un gran seguimiento entre los aficionados. Con ese planteamiento, la compañía acertó de pleno al elegir su primer juego: Recettear, un fantástico e original proyecto que consiguió ventas muy por encima de las modestas expectativas del grupo, poniéndoles en el mapa.

Depués del también notable Chantelise, su segundo proyecto, llega el turno para este Fortune Summoners, un título que los dos fundadores del estudio tenían mucho interés en conseguir pese a las dificultades. Se trata de un título desarrollado en el 2008 prácticamente por una sola persona, un programador japonés bajo el seudónimo de MEL, que se retiró de la escena ante la imposibilidad de vivir de sus creaciones. Los responsables de Carpe Fulgur consiguieron localizarlo y convencerlo para que diera a su juego una segunda oportunidad mediante la localización al inglés y la distribución digital en todo el mundo. Es gracias a esa iniciativa por la que ahora miles de potenciales de usuarios pueden disfrutar de un juego con mucho que ofrecer y que llega para aportar todavía más color a la floreciente escena independiente actual.

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Ya entrando en el propio juego, Fortune Summoner es un título de acción y plataformas en 2D realizado con sprites y con algunos elementos de RPG tales como progresión, equipamiento y habilidades especiales que se van adquiriendo. Es también la historia de Arche Plumfield, una niña hija de un conocido espadachín y dotada de una inmensa vitalidad que la convierte en un auténtico huracán, siempre dispuesta a comerse el mundo y a no rendirse ante las dificultades. El juego comienza con la llegada de la protagonista a un nuevo pueblo, Tonkiness, donde su familia se ha trasladado para montar una tienda y donde la niña comenzará a estudiar en una nueva escuela. La mayor particularidad de este mundo es que la magia existe y es ampliamente usada dentro de la sociedad, gracias al descubrimiento de unas piedras elementales que permiten concentrar poder mágico con el que realizar todo tipo de efectos, desde convocar energía elemental a cosas como hacer crecer flores acelerdamente, dependiendo de la naturaleza de la piedra.

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La estructura es bastante similar a la de Zelda II. Es posible ir y volver con libertad, pero ciertos caminos estarán cerrados hasta que las condiciones sean las adecuadas para poder seguir avanzando. También hay mazmorras repletas de enemigos y algunos puzles que habrá que superar para conseguir desentrañar sus misterios. Pero al poco de comenzar la historia ya se puede apreciar algunos de los elementos propios del juego, particularmente su altamente configurable sistema de IA, que hace que la mayor parte de la aventura se desarrolle en grupo, con dos amigas de Arche acompañándola en todo momento y luchando junto a ella: Stella y Sana, dos estudiantes de la escuela de magia donde la protagonista acude para seguir sus estudios y aprender magia. El jugador puede jugar con cualquiera de las tres una vez que estén integradas en el grupo, mientras que las otras dos están controladas por un muy competente sistema de de inteligencia artificial que se puede configurar en gran detalle para que el estilo de combate se amolde al gusto de cada uno y a la situación en la que se encuentren.

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Es un título de contradicciones, y eso es algo que queda patente desde el primer momento. Técnicamente es un tanto limitado, no es posible cambiar la resolución y las únicas opciones disponibles al respecto son jugarlo en una pequeña ventana, hacer lo mismo con zoom o probar pantalla completa pero con la imagen alargada, así que no es muy flexible. Por otro lado, el contenido visual en sí del juego es una auténtica delicia, especialmente para los admiradores del sprite. El grado de detalle en los escenarios es notorio, con una gran cantidad de pequeños toques que aumentan el encanto de sus paisajes. También destaca la animación con una gran variedad de movimientos y gestos que permiten reflejar mejor la personalidad de las niñas. Sobre el estilo, hay que volver a insistir con la palabra 'encantador' e incluso adorable: brillantes cielos azules, casitas de estilo europeo con sus chimeneas echando humo, campos con coloridas flores y poblados árboles... Todo es 'mono' en Fortune Summoners, desde las protagonistas a  muchos de los enemigos, lo que quizás eche para atrás a los alérgicos al azúcar, pero eso ya es cuestión de gustos personales. El trabajo gráfico, más allá del estilo, es verdaderamente destacable y sólo echado para atrás un poco por las evidentes limitaciones técnicas de un proyecto creado por una sola persona hace ya cuatro años.

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La segunda contradicción es que pese al aspecto inocente del juego, en él se esconde un reto brutal que masticará y escupirá a cualquiera que se acerque a él pensando en que va a ser un paseo. La base de esa dificultad está en la columna principal de todo: el combate, ya que los elementos de puzle y plataformas son minoritarios. La mayor parte del tiempo de juego está en los inagotables combates contra todo tipo de criaturas, incluyendo jefes de gran tamaño. El sistema de combate es denso y requiere de paciencia y atención, ya que los ataques a ciegas y machacabotones son castigados severamente por unos enemigos que no sólo son numerosos sino que también cuentan con numerosos recursos y patrones de ataque. Al principio, Arche sólo cuenta con algunos movimientos simples y puede desesperar un poco, ya que la mayoría de sus movimientos son estáticos cuando los enemigos saben medir bien las distancias, así que es necesario empezar a familiarizarse con los distintos ataques básicos y saber cuando son más efectivos por ángulo y alcance. Por ejemplo, ante un enemigo aéreo, la mejor táctica es protegerse y esperar a que intente atacar para descargarle un espadazo ascendente que lo pille en pleno vuelo, pero hay que usarlo en el momento justo. Hacerse con el control no es fácil y requiere de un proceso de aprendizaje; al principio parecerá lento y con demasiada inercia en el movimiento, pero con la práctica se empieza a aprender que el objetivo no es golpear rápido o muchas veces, sino golpear bien y en el instante adecuado, mientras que la inercia resulta vital para poder avalanzarse contra los enemigos antes de que puedan reaccionar.

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La lista de movimientos de la protagonista crece con la escalada de niveles, incorporando una sorprendente variedad de técnicas, incluyendo golpes descedentes con un salto, volteretas para acercarse o alejarse del enemigo, combinaciones de golpes, estocadas con giro que siempre ayudan a sorprender al enemigo y otros variados movimientos que hay que saber dominar para poder conectar el máximo número de golpes antes de que el enemigo se aleje o contraataque. Cada enemigo tiene sus propias estrategias, algunos son más directos, otros apuestan por golpear y escapar para ponerse fuera de alcance, mientras que hay variedades que usan conjuros tanto ofensivos como defensivos, ayudando a todo el grupo ya sea curando o con hechizos concretos como el de sueño, que puede poner al trio protagonista a dormir, dejando vía libre para que el resto del grupo enemigo ataque. La acción es rápida y es fácil cometer el error de quedar rodeado por enemigos, lo que es el preludio del desastre y requiere que el jugador tenga que escapar y reposicionarse si no quiere ser machacado por ambos lados.

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Claro que la protagonistas no están precisamente indefensas. Ya se ha comentado la habilidad con la espada de Arche, que basa casi todos sus ataques en el cuerpo a cuerpo. Pero Stella y Sana usan magia -Fuego y Agua respectivamente-, así que su función en el grupo pasa por apoyar los ataques con sus ataques normales con varitas o invocando poderosos hechizos que gastan maná. Cosas como curar, poner a los enemigos a dormir, lanzar bloques gigantes de hielo, crear poderosas llamaradas, barreras protectoras... hay una buena variedad de conjuros, algunos realmente espectaculares que encajan perfectamente con los momentos más dramáticos de la aventuras, con enfrentamientos contra colosales y poderosas criaturas. La IA se puede configurar de diversos modos en función de si se quiere ser conservador con el maná, dedicar una de las compañeras exclusivamente a sanar, o si por el contrario se quiere que utilice el conjuro más poderoso que tenga en cada momento, así com cosas más específicas como forzar a que sólo utilicen ciertos conjuros o habilidades, o su posicionamiento en combate. Además, es posible tomar el control de cualquiera de los tres y usar sus habilidades, por lo que aquellos que lo prefieran pueden dejar a Arche a la IA y dedicarse a la también complicada pero menos intensa tarea de apoyar desde la retaguardia, ya sea de forma ofensiva o defensiva.

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Cuesta un poco, pero al final es posible hacerse con el combate y sus particularidades. Algunos de los que ya han empezado a jugar lo han llamado el Dark Souls de los juegos 2D, lo que en términos de combate es algo que le va como anillo al dedo. Sin embargo, hay aspectos en la dificultad general de Fortune Summoners que no se pueden ignorar y que tienen que ver con su diseño. El principal de ellos es la manera en la que está estructurado, de un modo en el que muchas veces es necesario dar vueltas constantes por los mismos sitios, enfrentándose a los mismos grupos de enemigos uno y otra vez. A eso contribuye el hecho de que muchas veces no está claro qué hay que hacer para seguir adelante, ya que las pistas que el juego ofrece para ello, cuando las ofrece, pueden ser realmente confusas. La mayor parte de las veces, avanzar es una cuestión de hablar con cualquier NPC que se preste a ello, entrar en todas las casas y tocar todas las puertas has encontrar qué personaje tiene la clave para poder seguir adelante. El ir y venir sin tener claro qué hacer o donde ir es algo que a veces convierte la aventura en un ejercicio de frustración. También hay que tener en cuenta que las mazmorras pueden ser laberínticas, con múltiples puertas y accesos que hacen que perderse sea sumamente fácil aunque, afortunadamente, el juego ofrece la posibilidad de escapar renunciando a una parte de tu dinero, lo que es especialmente útil para salir y comprar objetos curativos, imprescindible para sobrevivir a algunos de los brutales encuentros.

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7.5

Bueno

Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.