Miedo para aburrir

A medio camino entre Project Zero y Myst, irrumpe en el género Echo Night: Beyond, una apuesta de Nobilis que desgraciadamente no termina de convencer con su, a priori, original propuesta. Cierto es que en muchas ocasiones, el auténtico terror, aquél que hiela la sangre, procede del que carece de acción y parafernalia complementaria. Prueba de ello lo tenemos en las últimas películas de terror procedentes de Japón, que sin el uso de pistolas y lanzagranadas son capaces de poner los pelos de punta a una sala de cine entera.

Sin embargo, parece que la gente de From Software se han olvidado, a la hora de enfocar su juego como un Survival Horror psicológico, que pese a todo estamos hablando de un juego, o lo que viene a ser lo mismo, de un reto videojugable.

g r á f i c o s
Pese a que globalmente no esté a la altura de lo que se espera de un lanzamiento actual para PS2, nadie puede negar las virtudes gráficas de Echo Night: Beyond. A decir verdad, incluso consigue sorprender en determinados aspectos.

Lo primero que llama la atención es la vista subjetiva bajo la cual controlamos al protagonista. Vemos todo lo que pasa desde dentro del casco de Richard, consiguiendo un efecto muy parecido al de Metroid Prime, con los indicadores de salud distribuidos por las esquinas de la pantalla. Un sistema nada convencional para un género como el del Survival Horror, pues salvo con los extras de Project Zero 2 para Xbox, no se había nunca disfrutado de una aventura de terror íntegramente desde esta perspectiva.

s o n i d o
Pocas sorpresas encontrarán en este apartado todos aquellos que hayan jugado a Project Zero. Silencios eternos quebrantados por los gemidos de los fantasmas que salen a nuestro paso. Aunque hay un par de detalles que ayudan a crear la atmósfera agobiante de la que hace gala el juego. La respiración de Richard, y el latido de su corazón. Ambos se acentúan en las situaciones de máxima tensión, y como hemos dicho, nos meten de lleno en la piel de Richard. Por lo demás, mención especial al magistral tema que acompaña a la intro del juego, de indudable calidad.

j u g a b i l i d a d

Como decíamos en la introducción del análisis, Echo Night: Beyond peca de avaricioso a la hora de representar el terror psicológico. Si en Project Zero ya se podía acusar la falta de armamento (aunque se resolvió divinamente gracias al prodigioso uso de la cámara de fotos), en el presente juego sí se echa en falta algún elemento que acentúe el contraste entre las secuencias de acción con las fases de exploración. La única forma de deshacernos de los fantasmas es mediante la resolución de algún puzzle relacionado con el individuo en cuestión. Parece que la moda de ponerse a ayudar a los no muertos ha dado el salto del cine a los videojuegos.

c o n c l u s i ó n
Quizás el problema haya sido enfocar a la tercera entrega de Echo Night como un Survival Horror, cuando sus cimientos poco distan de las clásicas aventuras gráficas. Pero ni el desarrollo del argumento ni la variedad de situaciones lo integran en tal género, así que nos encontramos con un juego que, como decíamos al principio, se ha quedado a medio camino entre una cosa y otra.