Army Men: RTS (PC)
Los clásicos soldaditos de plástico vuelven a invadir las plataformas de juego. Antes de su lanzamiento os ofrecemos un avance sobre este título de estrategia basado en los Army Men.
Army Men es una larga serie de títulos de varios géneros, pero con un denominador común: sus protagonistas son siempre soldaditos de plástico. Sí, has leído bien, el juego del que hoy nos ocupamos está protagonizado por soldaditos de juguete de esos que comprábamos en sobres de cinco duros cuando éramos pequeños. Y como no podía ser de otra manera dado el título del juego, en esta ocasión nos encontramos con un juego de estrategia en tiempo real al estilo clásico.
El argumento nos sitúa en el jardín, lugar al que nuestros soldados han sido expulsados debido a que el coronel Blintz se ha pasado al enemigo. La verdad es que todo ha sido por culpa de una herida que ha recibido en la cabeza, arráncandole gran cantidad de masa plástica. Lo primero que hizo tras eso, fue pintarse de marrón y unirse al ejército del mismo color. Nuestras tropas deberán luchar por conseguir volver a la casa, atravesando el jardín y otras habitaciones como el cuarto de baño o el salón. En estos escenarios podremos encontrar bonuses como vida para nuestras tropas, más rapidez o más potencia para sus armas.
El jugador deberá recolectar recursos y construir un ejército con el que derrotar al enemigo en cada una de las misiones que el juego nos ofrece, con títulos muy divertidos (como "La delgada línea verde" o "La chaqueta plástica"). Lógicamente, en esta ocasión el material a recoger será plástico, que obtendremos de los juguetes desperdigados por las diferentes misiones y de los soldados, edificios y unidades que han causado baja, puesto que en ese momento se convierten en un amasijo de plástico fundido.
Como es norma en un juego de estas características, dispondremos de varios tipos de edificios: el cuartel general, el garaje, las barracas, las torres de guardia, el depósito de recursos,... Y tampoco anda a la zaga el número de unidades disponibles: desde los soldados rasos o los armados con bazooka, hasta los tanques o helicópteros de combate. Pero además, contaremos con un grupo de aguerridos soldados que harán las veces de protagonistas, encabezados por Sarge. Cada uno de ellos tiene su propia personalidad y eso se deja notar en su manera de hablar.
El interfaz de usuario es muy cómodo. Siempre tendremos a mano iconos para acceder a los edificios que pueden construir unidades, para no tener que desplazarnos hasta ese lugar para ordenar la construcción. La verdad es que recuerda mucho al interfaz del primer C&C, pero actualizado a los tiempos modernos.
Podemos elegir tres modos de juego diferente (aparte del completo tutorial): campaña (jugar las 15 misiones de que se compone el juego), grandes batallas (8 misiones sueltas adicionales) o multijugador. Y en este último modo, podemos jugar con nuestros amigos por LAN e Internet tanto en partidas tipo Deathmatch, el Rey de la Colina u otras modalidades especiales. Hasta 8 jugadores pueden participar en estas partidas como amigos u oponentes.
Y no olvidemos que hay otras 4 misiones secretas que se activarán dependiendo del éxito conseguido en las misiones de la campaña, porque dependiendo de los objetivos que cumplamos, recibiremos medallas (bronce, oro o plata), que son las que permitirán desbloquear estas misiones ocultas.
En cuanto al aspecto técnico, en esta ocasión se ha optado por una vista tridimensional del escenario, con una cámara que podemos mover a nuestro antojo, optando por vistas que van desde una vista cenital a una en primera persona. Todos los modelos del juego se han diseñado con un aspecto muy...muy...bueno, muy plástico. Quiero decir que en todas las pantallas se respira un aire nostálgico que nos recuerda a cuando de pequeños montábamos unas batallas de órdago entre nuestros soldaditos.
Podremos ver patitos de goma en el baño, balones de baloncesto en el jardín y un montón de detalles más que ambientan el juego a la perfección (y que además es de donde sacaremos la materia prima para construir nuestro ejército). Se puede optar por una amplia gama de resoluciones para los gráficos, desde 640x480 a 16 bits hasta 1280x1024 en 32 bits y elegir entre varios niveles de detalle, para adaptarse a cualquier PC.
Otra de las cosas que llaman la atención del juego es el cuidado puesto en la elección de los temas que componen la banda sonora. Le da un aire entre militar y humorístico que cuadra a la perfección con un juego de estas características.
Por último, los requisitos del juego: Basta un Pentium a 233, con 64 MB de RAM y una tarjeta gráfica compatible DirectX8 con 4 MB de RAM para jugar. Aunque los creadores del juego recomiendan un PII 400 con 96 MB de RAM y una tarjeta gráfica de 16 MB para jugar con soltura.
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