
Dynasty Warriors: Origins
- PlataformaPCPS58.5XBS
- GéneroAcción
- DesarrolladorOmega Force
- Lanzamiento17/01/2025
- TextoEspañol
- VocesInglés, Japonés
- EditorKoei Tecmo
Review
Análisis de Dynasty Warriors: Origins, el padre de los musou regresa por la puerta grande
Omega Force nos trae uno de los juegos más completos de la mítica saga.
Dynasty Warriors: Origins significa el regreso de la mítica saga de Omega Force tras casi siete años desde el lanzamiento de Dynasty Warriors 9. Un juego que hemos podido probar en profundidad a lo largo de diversos eventos, y que con su versión completa no podemos salir más seguros de que el padre de los musou vuelve por todo lo alto. Un título que ayuda a asentar sus bases mientras añade novedades que suponen un aire fresco y un mayor desafío en los combates más masivos del videojuego.

Una saga que es historia del videojuego
Dynasty Warriors: Origins supone un reinicio para la saga que vuelve a narrar la historia de los Tres Reinos, basándose en la popular novela histórica del siglo XIV conocida como el ‘Romance de los Tres Reinos’, y que está ambientada en los turbulentos últimos años de la dinastía Han. Origins nos sitúa desde la Rebelión de los Turbantes Amarillos hasta la emblemática batalla de los Acantilados Rojos.
Origins es una entrega diferente al resto, y es que la saga Dynasty Warriors nos ha ofrecido a lo largo de los años batallas específicas desde la perspectiva de distintos oficiales, y ahora todo pasa por un héroe anónimo con amnesia del que poco a poco iremos descubriendo su verdadera identidad, y con el que viviremos en primera persona todos los acontecimientos que ocurren en los Tres Reinos. Los elementos RPG del juego nos harán tomar distintas decisiones que, en algunos casos, tienen relevancia de cara al final del juego.

Una elección diferente y llena de posibilidades en torno a la enorme cantidad de armas que tenemos a nuestra disposición así como las habilidades que vamos aprendiendo, con un sistema de subida de nivel que termina siendo un gran aliciente para seguir jugando y probar todo el arsenal que tenemos a nuestra disposición. El hecho de la variedad que aporta el héroe no quita que se eche de menos el jugar con distintos personajes, siendo muchos de ellos figuras de enorme carisma que nos acompañarán en nuestra historia, pero sin poder tener sobre ellos un control tan directo y amplio como la saga nos había acostumbrado hasta esta entrega.
Un combate más desafiante

Lo primero que llama la atención de Dynasty Warriors: Origins es que el combate, al contrario de lo que se pueda pensar, es mucho más que machacar botones para derrotar a cientos y miles de enemigos. La realidad es que Omega Force lleva tiempo puliendo una saga que, poco a poco, va acercándose en algunas aspectos al hack and slash, y en esta entrega sus enfrentamientos contra jefes precisarán de que utilicemos con inteligencia las distintas habilidades de las que dispongamos, así como esquivar y el parry, enormemente necesarios para terminar de la mejor forma con ellos.
Los ataques normales son la base y junto a ellos utilizaremos ataques de mayor poder para ir rompiendo la guardia de los enemigos más poderosos, realizando más daño. La Valentía es un aspecto muy importante de Origins, acumulándola conforme ataquemos, y utilizándola para realizar las distintas Artes de combate, los cuáles son distintos para cada tipo de arma y que iremos obteniendo a medida que avancemos en la historia principal y las distintas escaramuzas, que son batallas no obligatorias, pero que nos permitirán conseguir experiencias para mejorar tanto a nuestro personaje como las distintas armas y lograr más habilidades.

Es importante destacar el medidor musou, que se va cargando conforme avanzamos en la batalla y nos permitirá realizar un ataque de enorme contundencia. Es importante destacar a los oficiales como uno de los puntos más importantes, figuras de enorme poder y carisma que a lo largo de las diversas entregas de la saga han acumulado muchos seguidores. Los jugadores más habituados a la saga tienen a sus favoritos, y en Origins podremos a lo largo de la aventura y a través de diálogos, crear un vínculo que nos permitirá ir con ellos al campo de batalla.
En estas batallas se cargará un medidor especial, y cuando esté lleno podremos usar de forma temporal a este oficial en lo que son algunos de los momentos más espectaculares de Dynasty Warriors Origins. Los ataques más emblemáticos y un poder devastador que tendremos que usar en el mejor momento posible para que sean realmente decisivos.
Un punto considerable y que impresiona es el regreso del sistema de duelos, volviendo a la saga tras haber estado presente en Dynasty Warriors 4 y 6, y en esta ocasión luce mejor que nunca. Escenas de auténtico belicismo en el que ambos ejércitos se encargarán de rodearnos a nosotros y nuestro contrincante, alentando en un combate uno contra uno que es clave para el devenir de la batalla y uno de los momentos más entretenidos de todo el juego.
La táctica es clave en los Tres Reinos

Los tópicos en torno al musou son constantes, un estancamiento a la hora de definir el género que no es justo con lo que va ofreciendo e innovando conforme avanzan los años. En Dynasty Warriors: Origins las batallas en muchas ocasiones son mucho más que avanzar sin pensar, machacando botones sin ningún miramiento, y es que no solo en su combate contra jefes y nuestro poder individual, también es importante tener en cuenta a nuestra Gran Fuerza. Los soldados que lucharán a nuestro lado y que, cuanto mayor sea su moral, mayor será nuestra ventaja. Ejecutar con éxito las estrategias es de enorme importancia, permitiendo que nuestro ejército nos abra paso contra enemigos que no tienden a ser un problema, pero se nos aclarará el camino para enfrentarnos a los de mayor rango de forma más directa.
Un pelotón de cincuenta soldados al que podremos dar distintas órdenes, todas estas con un tiempo de carga, por lo que tendremos que pensar bien cada elección al no poder activarlas de forma continuo. Desde el ataque de los arqueros, pasando por un ataque de carga y otras estrategias que iremos obteniendo conforme avanzamos.
Más allá de combatir, también tendremos que eliminar eventualmente objetos para poder progresar en la batalla. Lo haremos gracias a los Ojos del ave sagrada, una función que nos permite ver lo que ocurre en el campo de batalla, pausando el combate y dándonos información destacada, y que servirá también para encontrar diversos objetos que tendremos que eliminar y así avanzar. Dynasty Warriors: Origins pone muchos recursos a nuestra disposición, y utilizarlos todos de la mejor forma posible es la mejor forma de disfrutar al máximo de lo que el título de Omega Force nos ofrece.
Un mapamundi y un sistema RPG con mucho que ofrecer

Los elementos RPG de Dynasty Warriors: Origins añaden frescura y dinamismo al título, y uno de esos puntos no tiene que ver directamente con la experiencia en batalla. El mapamundi del juego nos transporta directamente a otra época, en la que los videojuegos tendían a utilizar este tipo de tablero para salvar las enormes distancias entre lugares y así permitirnos recorrer su mundo dándonos una sensación de enormidad. En el caso de Origins ir encontrándonos las distintas misiones, escaramuzas, recursos y personajes que nos darán distintas habilidades de forma dinámica en un mapamundi que mejora la experiencia de mundo abierto que tuvimos en la anterior entrega.
En torno a nuestro personaje podremos ganar experiencia con las distintas armas que utilizamos y desbloquear Artes de combate, subiendo también el nivel del héroe, que junto a la mejora de atributos nos permitirá acceder a distintos árboles de habilidades que irán añadiéndose conforme avancemos en la aventura. Estos nos otorgarán destrezas tanto activas como pasivas, ayudándonos a personalizar aún más el juego.
Junto a las armas y nuestro equipamiento, las gemas son una parte importante del mismo, consiguiéndolas gracias al piroxeno que vayamos recogiendo en el mapamundi y creándolas de forma aleatoria en la posada o ciudad. Hay cinco tipos de gemas que gracias a sus habilidades pasivas nos ayudarán en nuestra partida adaptándose de la mejor forma posible a nuestro estilo de juego.
El musou que lo inició todo

Antes de terminar, merece la pena conocer los orígenes de una saga que inició un género. El musou lleva con nosotros desde el año 2000, fecha en la que salió en Japón un juego conocido como Shin Sangokumusou que cambiaba radicalmente lo visto en el anterior juego de Omega Force, Sangokumusou, un fighting game para la primera PlayStation. Este hecho provocó que en Occidente haya habido una desincronización con la saga, y es que el mencionado anteriormente Shin Sangokumusou aquí se conoció como Dynasty Warriors 2, tomándose como la continuación directa del juego de lucha que aquí se conoció como Dynasty Warriors y que en Japón quisieron rápidamente separar ambos títulos y así diferenciar a la perfección el inicio del musou.
No poder escoger más personajes y la ausencia de un modo cooperativo son puntos que muchos jugadores pueden echar de menos, y la cámara por momentos puede resultar confusa. Combates contra ejércitos gigantescos en un mundo abierto que nos propone un sistema de acción que recuerda por momentos al beat ‘em up/hack and slash, con cierto componente estratégico y una importante narrativa así como el desarrollo de sus personajes. Dynasty Warrios: Origins nos devuelve a los orígenes de la saga de la mejor forma posible, perfeccionando una fórmula que fascina a jugadores de todo el planeta.
Conclusión
Dynasty Warriors Origins ha conseguido que la saga regrese a lo más alto, un título que redefine al clásico sin olvidar su esencia, añadiendo un combate más desafiante junto a un enfoque táctico que en su conjunto dan una mayor profundidad a las batallas. Se echa de menos un modo cooperativo y la cámara puede confundir al jugador en los combates. Lo nuevo de Omega Force es una gran opción que os dará horas y horas de diversión.
Lo mejor
- Perfecto para adentrarse en Dynasty Warriors
- Un combate más desafiante y la importancia del parry
- Un mayor enfoque táctico que es todo un acierto
- La enorme variedad de armas y sus habilidades
- Los elementos RPG aportan profundidad y rejugabilidad
Lo peor
- No tener la posibilidad de jugar directamente con otros personajes
- La ausencia de un modo cooperativo
- La cámara puede resultar confusa
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.